Teatro Biobío acoge novedoso tapiz inspirado en Violeta Parra
La mano artesana del país también dijo presente entre los hitos inaugurales del Teatro Biobío. Bajo el proyecto "Bendigo las creaciones" se presentó ayer el tapiz inspirado en Violeta Parra, que acompañará de forma permanente el muro principal del cuarto piso del espacio cultural.
La obra, impulsada por el otrora Consejo de la Cultura y las Artes, hoy Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la Región del Biobío, cuenta con 86 paños confeccionados por 31 bordadoras y un bordador, provenientes de siete regiones distintas.
"Se puede ver reflejada una obra artística colectiva, que tiene un diseño lleno de sentido e historias", dice Marcia Orellana, seremi de Cultura y principal impulsora de la iniciativa.
El proceso creativo de cada paño duró aproximadamente tres meses. "Cada una trabajaba en su casa y después nos encontrábamos en las reuniones que hacíamos una vez al mes", apunta Ingrid Pinilla, una de las bordadoras de Copiulemu, que participó en la confección del tapiz.
La experiencia de participar en esta pieza artesanal, llena de orgullo a esta artesana de la Región. "Fue muy lindo el proceso, en lo personal aprendí a conocer más acerca de Violeta Parra, porque nosotros que vivimos en el campo desconocemos ciertas cosas. Fue emocionante trabajar en esto y hacerle un reconocimiento a ella, que fue bordadora igual que nosotras", complementa Ingrid.
TONOS CÁLIDOS Y FRÍOS
La composición de este trabajo artístico reunió colores, puntos y técnicas de bordados, que resultaron inusuales para gran parte de las artesanas.
"Para este desafío usamos colores y técnicas que no habíamos experimentado antes. Ninguna borda igual a la otra, pero todas hicimos nuestro paño de la mejor forma posible y quedaron muy lindos", señala Pinilla.
La curaduría del tapiz, estuvo a cargo de María Soledad González, directora de la Pinacoteca de la Universidad de Concepción.
"Mi aporte fue que no colocáramos los tapices como módulos, sino que buscáramos algún orden. Por eso las bordadoras decían que éste había sido un trabajo diferente y para muchas difícil, pero ellas entendieron lo que yo había querido, en cuanto a que trabajaran con colores fríos o cálidos y otras con fríos y cálidos. Pensamos que debíamos hacer una composición", sostiene.
Sin embargo, el resultado final de la obra no se dio como lo planearon inicialmente. "Siempre pasan cosas a última hora. Estaban todos los paños cortados perfectamente, pero hubo distintas manos y eso no lo teníamos considerado. Algunos se achicaron, otros quedaron grandes, entonces al ponerlos y jugando con el color no fue posible armarlos como queríamos", confiesa González, destacando que quedaron notorios espacios entre los paños donde se puede ver la pared.
Y lejos de ser un problema, la curadora del tapiz aprovechó el percance para incluirlo como parte del proyecto. "Fue un desafío interesante hacer una composición, donde hubieran espacios y viéramos a través de ellos lo que es el muro. Hicimos que éste se integrara a la composición y, finalmente, pienso que las cosas ocurren porque tiene que ser así", dice.
ESPACIO CON SENTIDO
El muro que acoge este trabajo hecho con lana, busca ser un reflejo de unión, dentro de este recinto recientemente inaugurado.
"Para nosotros era un sueño tener acá esta creación inspirada en Violeta Parra, porque de alguna manera esta división administrativa que existe hoy con la Región de Ñuble no existe territorialmente, o sea, la Violeta es de todos. Pasó un largo tiempo por la U. de Concepción (1957-1960) y tiene muchas raíces acá. Por lo tanto, nos sentimos muy orgullos de las bordadoras", destaca Mario Cabrera, presidente de la Corporación Cultural del Teatro Biobío.
En relación a la presentación, Orellana señaló estar muy conforme. "Estoy muy contenta y emocionada de ver el resultado del trabajo que, finalmente, culmina en el Teatro. Fue un compromiso y lo cumplimos. Además, feliz de tener aquí a muchas de las bordadoras participantes del encuentro, que partió el año pasado, en el marco del centenario de Violeta", cuenta.
Además, la seremi de Cultura se siente orgullosa de haber involucrado a más regiones en el proyecto, aunque inicialmente se pensó sólo para Biobío. "En un principio pensamos hacerlo en la Región y luego dijimos por qué no lo abrimos a otras. Hicimos el contacto con mis colegas de otros sectores del país y rápidamente se armó un interés por participar en este proyecto", comenta.
Es preciso recordar que este trabajo fue presentado en un encuentro realizado el 2 y 3 de septiembre del año pasado, en el centro cultural Curarrehue de San Pedro de la Paz, con la finalidad de transitar por los distintos territorios del país.
"En esa oportunidad, las artesanas presentaron sus paños y de ahí nació la idea de una composición", finalizó Orellana.