Enap descarta intención privatizadora por acuerdo con Linde
Un categórico rechazo a las denuncias de una supuesta privatización encubierta por el acuerdo que la Empresa Nacional del Petróleo (Enap) y la empresa Linde suscribirían, para traspasar el 10% de la propiedad de la Planta de Hidrógeno a esta última, manifestó el gerente de Asuntos Corporativos y Sostenibilidad la estatal, Gabriel Méndez.
Ello, tras la denuncia formulada por un grupo de dirigentes sindicales de la petrolera ante la Comisión de Minería y Energía de la Cámara de Diputados el pasado 10 de enero, por el eventual intento de privatización de dicha planta ubicada en la refinería Biobío lo que derivó en la citación para hoy miércoles a dicha Comisión del gerente general de Enap, Marcelo Tokman, con el fin de aclarar detalladamente todas las dudas que pudiese haber entre los legisladores integrantes de esta instancia.
Gabriel Méndez, explica que "como cualquier compañía debemos revisar permanentemente nuestra gestión realizando, si es necesario, algunas modificaciones, alcanzando nuevos acuerdos, enajenaciones o adquisiciones, buscando una mayor eficiencia y rentabilidad de sus activos. Nuestra postura en estos temas es clara: no renunciaremos nunca al diálogo con las organizaciones sindicales y a tomar decisiones gerenciales respecto a la cuales tenemos la convicción de que favorecen a Enap, a los trabajadores y al país".
core business",
"Este contrato permitirá asegurar el suministro de hidrógeno y vapor en el largo plazo con un operador de experiencia, tanto en Aconcagua como en Bío Bío, y en condiciones económicas y operacionales más favorables que las que se podrían obtener con terceros. Asimismo, se logra una reducción de la tarifa de hidrógeno que equivale al 30% del costo actual", indicó el ejecutivo.
La venta de ese 10% generará un beneficio para Enap de cerca de US$40 millones, asociados a las sinergias que se producirán en torno a este insumo en las unidades.
El hidrógeno se utiliza en procesos de desulfurización del crudo con el que se fabrican los combustibles, y en la industria global es usualmente aportado por firmas externas a las refinerías.
El convenio entre Enap y Linde considera una cláusula de retro compra al término del contrato de suministro (15 años), lo que significa que la estatal, una vez cumplido el periodo del acuerdo, podría recuperar el activo que habría sido objeto de inversiones que apuntan a mejorar su performance.