Baja en el dólar podría afectar negativamente a pymes exportadoras
El precio del dólar ha ido en retroceso desde el pasado 11 de diciembre, y durante la jornada de ayer llegó a $603,66, punto más bajo desde mayo de 2015, ocasión en que promedió $607,60.
El comportamiento preocupa a las entidades de fomento, las que plantean que la baja en el valor de la divisa podría tener negativas consecuencias para las pymes dedicadas al comercio exterior. Si bien dichos números pueden ser en principio positivos para el sector importador, que puede renovar maquinaria y equipos a un menor costo.
El gerente de la Asociación de Exportadores de Manufacturas del Biobío (Asexma), Alfredo Meneses, detalló que las pymes que tienen participación internacional operan actualmente con utilidades que no superan el 7%, por lo que una disminución en dichos márgenes podría generar reducciones tanto en sus ganancias como en la cantidad de dinero que éstas poseen para gastos operacionales.
De este modo, este fenómeno afecta de manera especial a la región del Biobío, cuyo PIB depende en aproximadamente un 59% del comercio exterior.
"Lo que está ocurriendo es preocupante, ya que los empresarios exportadores recibirán menos pesos chilenos a la hora de liquidar los dólares que han percibido. Si esto es llevado a la escala de quienes recién están comenzando a emprender, podríamos encontrarnos con que varios podrían estar en riesgo de quedar fuera de carrera", explicó el ejecutivo.
Los sectores productivos de la Región que poseen mayor participación en el comercio exterior están representados por el de celulosa, con un 42%, y el forestal, con 38,7%.
A pesar de que la baja en el dólar también afectará a estas industrias, Meneses explica que el impacto que éstas recibirán será muy bajo, ya que se trata de empresas robustas y altamente competitivas.
En ese sentido, el dirigente gremial precisó además que lo anterior se debe a que los márgenes de utilidades con los que operan son mucho más amplios que los que hoy poseen las pymes, por lo que los efectos derivados del retroceso de la divisa estadounidense no les generarán pérdidas.
Lo anterior deja a las pequeñas y medianas empresas en una posición difícil. Con utilidades que van desde un 3% a un 7%, muchas de ellas pueden tomar la decisión de dejar de exportar, lo que según el director de ProChile Biobío, Renato Segura, generaría un retroceso para la Región.
Esto último, a juicio de Segura, complicaría aún más el clima para los emprendedores de la zona, ya que de según las cifras que actualmente maneja la entidad una de cada tres empresas que se suma al comercio exterior en la zona deja de exportar después pasado un año.
Añadió que "sólo un 1,6% de nuestras pymes participa hoy en el extranjero, lo que nos deja bajo el promedio nacional, que es del orden del 2%. Con este tipo de cambios, todos nuestros esfuerzos por hacer que las empresas exporten se ven diluidos".
Entre los sectores que pueden verse más afectados por el fenómeno destacan los dedicados al comercio de commodities, como lo son el frutícola, el vitivinícola y el de la madera aserrada. Dichas áreas son particularmente sensibles a las fluctuaciones, debido a que poseen una baja diferenciación respecto de sus competidores, lo que disminuye sus posibilidades dentro del mercado.
Por ello, desde la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex) manifestaron su preocupación frente al tema, ya que la divisa actualmente se encuentra en un valor inferior al que posibilita la rentabilidad normal del negocio. Para corregir dicha diferencia, la organización explicó que esperan solicitar una disminución de un 0,5% en la en la tasa de la política monetaria (TPM) del Banco Central, para lo que se reunirán prontamente con el consejo de la entidad bancaria.
SEGURIDAD EN LAS TASAS
La industria de la celulosa es una de las más consolidadas a nivel regional, y actualmente sus empresas se encuentran produciendo prácticamente a plena capacidad.
Por lo mismo, resulta necesario buscar nuevas alternativas de crecimiento en sectores como el agroindustrial y el vitivinícola, lo que según el gerente general de Asexma, Alfredo Meneses, sólo puede ser posible si el Estado es capaz de asegurar algunas de las condiciones básicas para dichas áreas se desarrollen.
En ese sentido, el representante regional enfatizó en que el próximo gobierno debe hacerse responsable de ofrecer forwards financieros para todos los emprendedores, que permitan fijar la tasas de cambio y reducir los riesgos asociados a la actividad empresarial.
Dichas nociones fueron también compartidas por el ministro de Economía, Jorge Rodríguez, quien aseguró durante la mañana de ayer que la preocupación por el aseguramiento de estas condiciones debe recaer tanto en el Banco Central como en el equipo económico del próximo gobierno entrante.