"Los científicos deben perder el miedo de hablar de su trabajo en público"
Entre paneles y exposiciones, Gabriel León reconoce que este año ha sido uno de los más demandantes en materia de viajes. Hecho reflejado en su visita exprés a Concepción, donde participó del congreso de la Sociedad Chilena de Infectología y apoyó la difusión de la conferencia internacional de Cultura Científica, que realizará la Universidad Andrés Bello (Unab) a fin de mes.
El bioquímico y doctor en Biología Celular y Molecular es uno de los principales difusores de avances en materia de investigación en todo el país y una de las voces obligadas al hablar de comunicación científica y opinar sobre los procesos que vive el país respecto a ciencia, tecnología e investigación.
"Ha sido un año muy agitado, ya que dirijo el Centro para la Comunicación Científica de la Unab y doy charlas por el país. Además publiqué un libro (La Ciencia Pop) al que le ha ido bien, firmé para escribir dos más y he trabajado para programas de televisión. Este año me ha permitido vincularme con personas de distintas áreas", expone.
-Es un momento interesante, porque efectivamente hubo una especie de "boom" que se inició hace algunos años con ciertas iniciativas de difusión masiva, pero este año explotó con la venta de libros, demostrando el interés de las editoriales por un producto atractivo como la ciencia, lo que sirve como un vehículo para acercarla a la gente, demostrándoles que es entretenida, no es lejana ni árida como se piensa. Ha sido provechoso, ya que hay científicos interesados en la difusión y que lo hacen muy bien.
-Eso puede ocurrir en cualquier ámbito. Este en particular tiene una consistencia en el tiempo que permitirá que se consolide. José Maza va en la séptima edición de su libro, yo en la cuarta, y vendrán muchas más. Esto se materializará y aparecerán autores nuevos. Además hay muchos jóvenes entre 25 y 30 años que estudian ciencia y la difunden por otros canales, como las redes sociales y han captado un gran interés en la gente.
-Los investigadores deben perder el miedo a hablar de su trabajo en público. La ciencia no ocurre sólo en los laboratorios de investigación y la imagen del investigador está trastocada por estereotipos culturales. El científico es un tipo normal, sólo con un trabajo un poco distinto. Es interesante exponer el trabajo que realizan y sobre todo el impacto regional que tiene al resolver problemas para su propia zona, lo que genera interés y cercanía de la ciudadanía.
MINISTERIO Y RECURSOS
-Tenemos un retraso evidente en materia de institucionalidad de la realidad científica, que depende de una unidad (Conicyt) dentro del Ministerio de Educación, que tiene intereses propios. Existe consenso dentro del mundo científico que debe existir una nueva institucionalidad. Ningún gobierno ha articulado un aparato estatal que delimite políticas de CyT y no creo que el ministerio llegue a la discusión de Ley de Presupuesto, los tiempos no van a dar, por lo que dependerá del próximo gobierno lo que ocurra con el ministerio.
-Hay que ver cómo se materializa el compromiso de palabra en apoyos a más recursos. Necesitamos políticos comprometidos con el desarrollo de la ciencia.
-Primero, toda la verdad: hoy hacer investigación en Chile es entrar a un mundo precario, pero la ciencia sigue siendo maravillosa, tanto para sus carreras como para sus vidas. La ciencia es una forma de enfrentarse a la naturaleza de manera sistemática para entenderla mejor. Sigue siendo valioso hacer ciencia, independiente de que si se convierte o no en tu trabajo futuro.