Veda de merluza concluyó con fuerte baja en decomisos
Una ostensible baja registró lo requisado en esta temporada de veda de la merluza que va del 1 al 30 de septiembre alcanzando apenas a los 12 kilos, bastante menos que las 6 toneladas que se retuvieron en 2016 tras las infracciones cursadas por el Servicio Nacional de Pesca (Sernapesca).
Esto revela una mayor conciencia ciudadana respecto de respetar estos periodos con el fin de resguardar el recurso, destaca la directora del Sernapesca, Lilian Troncoso, quien señala que "hay una diferencia en el comportamiento de la gente que ha asumido la veda como parte de la historia, lo que ha sido muy importante para nosotros".
También se ha percibido una recuperación del tamaño del recurso, lo que tiene que ver con el uso de mallas de tejido más ancho que permiten capturar ejemplares más grandes; un cambio que a juicio de la directora regional tiene que ver también porque mientras más grande es el ejemplar mayor es su precio por caja, lo que, a su vez, se traduce en una mejora del recurso, porque son menos ejemplares en una caja que generalmente son 28 a 30 kilos, lo que asegura algo de sustentabilidad.
El precio fluctúa en los buenos periodos entre los $25 mil y $30 mil la caja. Cuando hay mucho desembarque el precio empieza a bajar y puede llegar hasta $10 mil.
La Región tiene una cuota de 3 mil 20 toneladas, del sector artesanal básicamente. Queda un saldo de 1.792 toneladaspara estos tres meses. En este sentido, la autoridad llamó además a cuidar el recurso en este periodo sin veda, a no extraerla en forma excesiva.
En las áreas de Tomé y Cocholgüe son principalmente las zona merluceras de la Región, y ellos tienen también las mayores cuotas. A ellos les recomendó mejorar la calidad de sus redes "porque de este modo le estamos dando más posibilidades a la especie de recuperarse en el tiempo".
El programa de fiscalización y control se mantiene no obstante durante todo el año tanto para el sector artesanal como para el industrial.
Lilian Troncoso dijo que la merluza está de regreso y está la oportunidad de consumirla bien. "Nosotros nos preocupamos de aquellos restoranes y expendios de este recurso y de cerciorarnos que utilizan productos de origen legal. Como Servicio tenemos también el Sello Azul que está siendo muy utilizados por los restoranes que se preocupan de que los recurso tengan un origen legal, lo que le da más valor a sus negocios, porque cada vez más el consumidor exige y reconoce que hay una legalidad que debe cumplirse en lo que está consumiendo".
En esta misma línea, el seremi de Economía, quien degustó un sándwich de merluza en el local Donde Vitoco, donde elaboran distintos platos en base a merluza, destacó que la veda terminó, lo que significa que ya se puede comercializar y agregó que "es importante invitar a la comunidad a visitar estos locales, porque con ello están reportando con ingresos a estos empresarios y con eso se mueve de una u otra forma la economía de emprendedores locales que están preparando alimentos con todas las normas fitosanitarias, es decir, se compra a proveedores establecidos y eso es promover la economía, porque también aportan al empleo de la Región del Biobío".
Mientras tanto, Víctor Ibarra, dueño de la cocinería Donde Vitoco, y anfitrión de esta actividad, recuerda que estuvo 33 años con cocinería en el Mercado Central de Concepción y en el mercado provisorio, lleva un año. Dice que el negocio no está mal, pero falta que venga más gente, "a la que invito porque aquí está bonito, muy higiénico para que venga toda la familia".
Él se lució con sus preparaciones de merluza, pero la guinda de la torta fue su sándwich de merluza a lo pobre que, explicó, lleva papas fritas, huevo, cebolla sudada en un pan. También se prepara el caldillo de merluza, la tradicional merluza frita, a la plancha y croquetas de merluza.
Aseguró que la merluza es el pescado más popular, porque es la más económica y sabrosa.