Científicos recrean "lluvia de diamantes", que se da naturalmente en planetas como Neptuno y Urano
La Tierra es el único lugar del Sistema Solar en el que el agua líquida fluye en la superficie y se precipita desde el cielo, pero los otros planetas también tienen tormentas, lluvias y hasta ríos. De hecho, algunas teorías apuntan a que los planetas gigantes de Urano y Neptuno sufren presiones tan elevadas, que allí puede ocurrir algo maravilloso: una "lluvia de diamantes".
La teoría que se maneja es que si las moléculas de metano de estos planetas se rompen, el carbono que las forma se precipita y puede unirse formando grafito o, oncluso, pequeños ejemplares de este mineral precioso.
Ante esto, un equipo de investigadores del laboratorio alemán Helmholtz Zentrum Dresden-Rossendorf consiguió diseñar un experimento capaz de reproducir el núcleo de estos gigantescos planetas gaseosos, sin la necesidad de viajar hasta ellos. Gracias a eso, por primera vez han podido producir en el laboratorio los ingredientes de la "lluvia de diamantes".
"Hasta ahora, los investigadores solo podían asumir que los diamantes podían formarse", dijo Dominik Kraus, primer autor del estudio. "Pero cuando vi los resultados del último experimento, fue el mejor momento de toda mi carrera científica".
Los resultados presentados, que fueron publicados esta semana en la revista Nature Astronomy, constituyen la primera observación inequívoca de la formación de diamantes a altas presiones a partir de mezclas que en principio podrían aparecer dentro de Urano y Neptuno.
Según los investigadores, estos conocimientos ayudarán a entender y clasificar los exoplanetas gaseosos (planetas no rocosos situados más allá del Sistema Solar). Normalmente, esta clasificación se hace a partir de la relación que existe entre radio y masa, entre otras cosas porque esto es un indicador de la posible composición química del planeta en cuestión.
"No podemos adentrarnos en los planetas para mirar, así que estos experimentos de laboratorio son un buen complemento para las observaciones de satélites y telescopios", finalizó Kraus.