Factores cotidianos como la ventilación pueden aumentar el riesgo de contagio
Cada invierno es una preocupación para las autoridades, año a año deben tomar medidas respecto de las enfermedades respiratorias. Muchas veces las campañas de invierno y la importancia que se le da a lo relevante que es la vacunación a tiempo, no son suficientes para disminuir los contagios, puesto que también existen factores cotidianos como la ventilación y la calefacción que generan transmisiones de todas formas.
Gonzalo Reyes, kinesiólogo y académico de la Universidad San Sebastián, comentó que lo más importante para prevenir los contagios de enfermedades respiratorias es la vacunación. "La inmunización anti influenza, especialmente en los grupos de riesgo como son los menores de dos años, adultos mayores y pacientes con patologías pulmonares crónicas como asma o Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), es primordial", aseguró.
Pero por otra parte, el académico sugirió tener en cuenta algunos factores cotidianos que también pueden influir en el contagio de virus. "Si utilizan pañuelos, que de preferencia sea desechable, ya que al ser de género se mantienen los microorganismos. También se recomienda lavar las manos luego de utilizar un pañuelo, ya sea desechable o no", comentó.
Asimismo, el kinesiólogo también recomendó mantener una adecuada hidratación, en todas sus formas posibles como puede ser el jugo de frutas cocidas, agua de hierbas, infusiones u otros, ya que por un lado hace que las secreciones sean menos densas y así más fáciles de ser eliminadas.
"También es preciso evitar los excesos de ropa y el exceso de calor, teniendo en cuenta que la cantidad de calor adecuada es aquella que evite la generación de sudor. En caso que éste se produzca se debe cambiar la pieza de ropa lo más pronto posible", afirmó.
IMPORTANCIA DE VENTILAR
Muchas veces las temperaturas del invierno pueden ser poco agradables, y el frío pasa a convertirse en el personaje principal durante las jornadas invernales.
Pero aún así, es preciso saber que ventilar es clave para cambiar el aire y así eliminar los posibles virus que se puedan encontrar en el aire. "Se debe ventilar el hogar a diario para la renovación del aire intradomiciliario y la disminución de la humedad al interior del mismo", afirmó Reyes.
De esta manera, el experto en el área señaló que el tiempo recomendable para mantener las habitaciones ventiladas va a variar, según el tamaño de la habitación y si las condiciones ambientales externas son las adecuadas para hacerlo. "Independiente de esto, es recomendable un tiempo que puede ir entre los 30 minutos y las dos horas", agregó.
Es así como el kinesiólogo también se enfocó en la importancia de poner atención a las habitaciones como dormitorios y la cocina, ya que es en éstos donde las personas pasan más tiempo. "Hay que evitar o prevenir la humedad de estos lugares que tienden a generar condiciones ideales para la proliferación de microorganismos que pueden generar o agudizar las enfermedades respiratorias", apuntó.
Según esto, el especialista recalcó que los microorganismos que pueden afectar al sistema respiratorio, ya sean virus o bacterias, tienen la capacidad de mantenerse al interior de los hogares si es que están dadas las condiciones adecuadas de humedad y temperatura.
EXCESO DE CALEFACCIÓN
Así como es importante mantener la ventilación en el hogar, es igual de relevante tener cuidado con la calefacción y no exceder las temperaturas en habitaciones o espacios más cerrados.
Reyes, especificó que la calefacción influye dependiendo del tipo de combustión que se utilice, ya que es diferente si se realiza a leña, gas, parafina o eléctrica. "Cada una de ellas tiene algunas ventajas y desventajas, que van desde lo económico hasta la contaminación del aire intra domiciliario que pueden generar, tanto por el tipo de combustión o por las condiciones en las que se encuentre la estufa", mencionó.
Esto se traduce en una mayor o menor humedad del aire al interior del hogar, según el tipo de generación de calor que se utilice, por la condensación del vapor de agua, lo que puede predisponer a una mayor irritación de las vías respiratorias en pacientes crónicos como los asmáticos, desencadenando o aumentando su nivel de obstrucción.
Josefa De Pablo De Geyter, académica de la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello, también comentó que dormir al menos entre siete y nueve horas diarias es otro factor importante a la hora de evitar contagios. "Los problemas de sueño entre otras muchas cosas, pueden producir alteraciones en el sistema inmunológico en el largo plazo", aseguró.
En el mismo contexto, la especialista recomendó buscar un espacio para relajarse luego de un día estresado. "Si bien el estrés se ha convertido en parte de la vida de las personas, no es inocuo para nadie. Altos y constantes niveles de estrés pueden generar problemas y uno de ellos es el sistema inmunológico", concluyó.