Biobío se colgó una presea que no se le podía escapar
Tras la derrota ante el poderoso equipo de Valparaíso en semifinales, la selección femenina de balonmano del Biobío supo dar vuelta rápido la página y reencontrándose con su gran nivel no tuvo problemas para vencer ayer por 49-14 a Coquimbo en el gimnasio Municipal de Concepción en la definición por la medalla de bronce.
De principio a fin, el equipo destacó en la faceta de transición y gracias a rápidas rotaciones mantuvo el dominio sin correr riesgo alguno en el marcador.
"Lo de la semi ante Valparaíso fue complicado porque entramos dormidos y los primeros 20 minutos nos costaron caro. Por eso pienso que el bronce pasa a ser un buen premio, merecido para las niñas porque se van con algo a sus casas y porque el único partido que perdimos fue ante el campeón", cuenta el coach.
También consigna el hecho que "nuestras chicas se la jugaron por la Región y dejando incluso la selección chilena o proyectos internacionales por estar acá. Eso es muy valorable", añade.
Una de las figuras destacadas en el plantel fue Javiera Baumann (17). La extremo central debutó en los Juegos y fue una de las piezas claves en el engranaje destacando por su movilidad y rapidez para vulnerar la zaga contraria. "Muy contenta porque demostramos que somos un equipo afiatado, aunque sería ideal tener mayor tiempo de entrenamiento juntas. Como somos de clubes de distintos puntos es más complicado poder reunirnos en forma continua, a diferencia de Valparaíso, que tiene a casi todas sus seleccionadas", explica la carta del Cubla (Los Angeles).
En la final femenina Valparaíso se impuso 35-16 a la Metropolitana.