Sorprendido por las demandas interpuestas por la Clínica Sanatorio Alemán (CSA) en contra de Isapre Masvida se mostró el presidente del Holding MV, David Medina, quien afirmó que están recién a 21 de abril y faltan 10 días para que la nueva aseguradora tome el control.

Hay que remarcar que CSA puso tres demandas. El abogado fiscal de la clínica, Bernardo Buscaglione, explicó que se trata de tres gestiones preparatorias de la vía ejecutiva de las razones sociales distintas, que son Clínica de la Mujer Sanatorio Alemán S.A., por Ecotomografía Sanatorio Alemán S.A. y por Servicios Sanatorio Alemán SpA.

Por la primera es por 264 facturas impagas, por la segunda 17 y la tercera 144. Todas superan los $2.000 millones en deudas que se arrastran del año pasado. El último pago se efectuó a fines de marzo pasado por un monto bajo y solo un par de días del anuncio que hizo el gerente general de CSA, Jorge Plaza de los Reyes, quien había sostenido que en enero fue el último mes que IMV había pagado por una cantidad significativa y de acuerdo a la liberación de garantías.

Buscaglione sostuvo que el depósito del tercer mes de este año fue el último contacto que tuvieron con el administrador provisional de MV, Robert Rivas, y desde ahí no han tenido más información.

DIFICULTAD

Sobre esto, Medina indicó que presentar ahora una querella para de alguna forma "hacernos dificultad a todo lo que estamos haciendo, cuando Rivas tomó el control el 2 marzo, creo que no es bueno. Además, se trata de facturas de enero sobre prestaciones que se hicieron el año pasado, al menos es lo que yo vi".

Dijo que le llama la atención que CSA no ejerciera acciones legales antes de la llegada del administrador provisional, momento que cree habría sido el mejor. Ahora, hizo ver, no sabe cuál es la relación de ellos con algunas interesados en comprar las clínicas en su momento, porque "reitero, me llama la atención el momento en que se presentan estas querellas. Pues ahora se hizo un acuerdo para garantizar los pagos a los prestadores médicos".

Asimismo, afirmó que enero y febrero pasado la isapre no tenía dinero para pagar y si algo se adelantó fue muy poco. Después, Robert Rivas tiene que seguir el orden de acuerdo a la protección que tiene que dar a los afiliados y a la múltiple cantidad de prestadores de salud que hay. Apuntó que si bien las clínicas son entidades privadas que tienen que reportar utilidades a sus dueños, también está el servicio de salud, que es muy especial, con ciertas características.

Recordó que si no se hubiese adoptado este acuerdo entre Nexus e IMV, se habría licitado la cartera y se hubiese producido una pérdida mucho mayor de los acreedores. También, afirmó que como directorio no tienen ninguna injerencia en los pagos, pero sí los ingresos en abril debieron ser mucho menores debido a la salida de afiliados en febrero, antes de la aplicación del "corralito".

Esto, generó menos ingresos para poder cubrir todo y por eso el interventor debe amortiguar los flujos y dar a los prestadores ciertas cantidades. De ahí que indicó que a CSA se le pagará y que tengan paciencia, pues con el traspaso va a contar con recursos en mayo. Además, indicó que Nexus se comprometió a que lleguen flujos a las clínicas, pues les interesa que los prestadores estén bien para conservar la atención con los afiliados.

INCERTIDUMBRE

El abogado fiscal de CSA indicó que "entendemos que el acuerdo al que llegaron Nexus con el interventor deja en una situación de incertidumbre a los prestadores. Por eso escogimos esta vía (judicial)", aclaró, añadiendo que la decisión de concretar esta acción en los tribunales fue adoptada por el directorio, tal como también lo hizo al suspender la recepción de los bonos de MV.

Sobre esto, Medina señaló que es lícito que muchos tengan aprensiones al respecto. Pero el tema es que sin el acuerdo no habría existido caja para cumplir con los acreedores, afirmando también, que CSA está dentro de las deuda garantizada.

Remarcó que este año ellos (Sanatorio) hicieron un aumento unilateral de un 8% en las prestaciones, piden un copago a la gente de IMV en la atención con valores que son mucho más altos que los de la Clínica Universitaria.

Buscaglione, sin querer entrar en detalles, subrayó que no les genera certeza ni confianza que se vaya a poder pagar las deudas una vez que nazca la nueva isapre. Incluso, con Rivas no han tenido ningún contacto y se supone que deja su misión a fines de abril. Sobre Óptima, la firma que pasará a tener el control de Masvida, tuvieron una reunión para ver la posibilidad de firmar un convenio, pero no más que eso.