Mazda lanzó en Concepción su modelo insignia: el CX-9
Si hay algo en que Mazda se ha caracterizado en los últimos años, es en el diseño al que denominaron Kodo, que significa alma en movimiento. Y en esto el nuevo CX-9 R está a la vanguardia.
El nuevo modelo ya está en Concepción de la mano de Sergio Escobar. Este medio probó este SUV de grandes dimensiones, pues mide 5 metros de largo y pesa 2 toneladas de peso. Pese a ello, la conducción no es nada de pesada y al contrario, es suave y segura.
Además de esta versión, que es como la de entrada, Mazda presenta otras dos, que son la GT y GTX, con un motor Skyactiv-G de 2,5 Lt, 16 válvulas, 4 cilindros en línea y una capacidad de 74 litros de combustible. Pese a esto, Andrés Figueroa, ejecutivo comercial de Sergio Escobar, explicó que lo mejor es que usa bencina de 93 octanos (más barata) y entrega un rendimiento de 7,8 km por litro en ciudad, 10,8 mixto y 13,9 en carretera.
"Estos consumos se pueden conseguir conduciendo dentro de ciertos parámetros, porque finalmente esto lo va a poner el propietario. En todo caso, para lo que es el tamaño del móvil, el consumo es muy bueno", hizo el alcance.
El experto sostuvo que es el modelo insignia de la marca y fue el último en renovarse en toda la gama de la empresa de origen japonesa. Detalló que para este modelo se desarrolló un motor especial. Por ende, todas las versiones que llegarán al país utilizan la misma planta motriz al igual que el tren de fuerza.
Si se baja a cuarta, se obtiene una respuesta más reactiva o deportiva. Si se llega a tercera, el paso de revoluciones casi ni se nota.
Lo clave es que para un vehículo como este, que es de alta gama, y para el segmento al que apunta, que no es solo familiar, apunta a que genera sensaciones de manejo. Por eso, que al ser un transporte de 4 cilíndros, de inmediato se nota que es liviano de maniobrar, sin tirones, no se esfuerza, la caja no se siente al pasar de un cambio a otro.
Lo bueno de todas las versiones que arriban a Concepción es que son cajas automáticas, 4x4 comparten el motor de 4 cilíndros de 2,5 litros gasolina y turbo.
En los referente a la parte exterior, llama de inmediato la atención sus postura elegante, con llantas imponente de 20 pulgadas y una delantera con mirada desafiante. Una de las cosas que remarcó el ejecutivo es que pareciera que no trajera neblineros, pero son tan pequeños que solo son perceptibles una vez que se encienden.
Los comandos también son fáciles de maniobrar. Partiendo por el manubrio, que está recubierto de cuero, los demás controles están a la mano, en particular la palanca de cambios, que como es automática, es cosa de colocarla en movimiento y listo, aunque también se puede pasar a manual en el momento que se desee y con solo pequeños toques pasa de una de las seis velocidades que tiene.
Posee una consola central, con HMI Commander, que es más alta y ancha de lo tradicional, posee además una transmisión con modo sport y freno de mano electrónico, lo que en su conjunto eleva la sensación de confort y lujo.
También cuenta con su sistema multimedia MZD Connect -disponible en todas sus versiones- el que funciona igual que un smartphone y que permite que el conductor tenga acceso de una manera segura y sencilla a la música, comunicación y navegación GPS del vehículo por medio de una pantalla táctil de 8 pulgadas.
Destaca también en este renovado modelo su sistema de audio que incorpora, en las versiones R y GT, seis parlantes estratégicamente instalados que permiten obtener una increíble experiencia de sonido y en su versión tope de línea GTX, 12 parlantes Bose, que hacen inigualable su performance de sonido.