La inversión del sector privado en los últimos meses se ha limitado a acciones de mantenimiento de sus instalaciones y a asegurar la estabilidad laboral de sus colaboradores, más que a expandir sus negocios. Esto debido a que la economía, en general, aún no muestra relevantes signos de recuperación, situación que se proyecta para todo el presente año.

Por otra parte, preocupan los efectos que tendrán en diversos sectores productivos, los incendios forestales que se han registrado en nuestra Región en las últimas semanas.

En percepción de los empresarios, la catástrofe provocada por los incendios que han asolado la zona en las últimas semanas traerá consecuencias relevantes en los precios y capacidad productiva de varios sectores, más allá del forestal, como el vitivinícola.

Estas son algunas de las principales conclusiones que arroja el Informe de Percepciones de Negocios del Banco Central, estudio que se entrega cada tres meses y cuyo trabajo de campo consiste entrevistas a altos ejecutivos de alrededor de 200 empresas de todo el país, en este caso, realizadas entre el 5 de diciembre de 2016 y el 27 de enero pasados.

OPINIÓN ESTATAL

Al respecto, desde el gobierno, el secretario regional ministerial de Economía, Iván Valenzuela, destacó que esta medición evalúa la opinión y la proyección de los encuestados, por lo que no se condice necesariamente con el hecho de que la economía del país sí está creciendo en términos normales dado el concierto internacional. "No debemos perder de vista que nuestra economía está centrada en recursos naturales y, en ese contexto, el cobre y la celulosa han tenido cierta alza muy moderada, pero no es suficiente para incentivar inversiones futuras", explicó. Respecto de la contingencia, el seremi dijo que "tenemos que sumar las consecuencias que tendrán los incendios con pérdidas de grandes hectáreas en bosques, que aún no la tenemos cuantificada, pero se proyecta que el impacto va a venir en dos o tres años más, por lo que este año, la economía va a crecer alrededor del 2%, como proyecta el Fondo Monetario Internacional", enfatizó Valenzuela.

En cuanto a la internalización de las inversiones por parte de las empresas de Biobío, el personero explicó que "Brasil últimamente ha estado decreciendo y, por eso, aparecen como más atractivas las economías de Perú y Colombia, que, si bien han crecido, tienen cierto rezago respecto de Chile, ya que nosotros hemos tenido un alza más sostenida en el tiempo, y contamos con normativas acorde a eso", enfatiza.

PROYECCIONES

Claudio Parés, director del Departamento de Economía de la Universidad de Concepción, UdeC, explicó que está de acuerdo con una de las conclusiones del estudio que señala que las reformas laboral y tributaria contribuyeron a desacelerar la economía. "Se espera que este año se diluya un poco ese efecto, pero ahora se suma volatilidad internacional con la elección de Donald Trump en EE. UU. y en Francia, donde se impuso la extrema derecha, también hay amenazas de que se va a restringir de cierta forma el comercio, a través de medidas proteccionistas. Esto, además, se junta con factores como el bajo precio del cobre y lo que ocurre hoy con los incendios, todos factores que no van a hacer otra cosa que debilitar la actividad económica", detalló el académico, que ve en la reconstrucción de los sectores asolados por los incendios una oportunidad de reactivar la economía, similar a lo que sucedió tras el 27/F. "Aunque ahora no tenemos la holgura presupuestaria que teníamos en 2010 para que el Estado salga a gastar, por el precio del cobre y el paso del balance estructural al déficit estructural", advirtió el investigador.

En relación con al difícil acceso a créditos que acusan los ejecutivos entrevistados, Parés señala que "uno de los aprendizajes que nos dejó la crisis subprime es que hay cosas más importantes que la tasa de crédito, esto es que aunque están muy baratos, dada la volatilidad que hoy hay, es mucho más probable que las empresas deban enfrentar una quiebra, o sea las expectativas de los bancos de recuperar las inversiones es menor".

En cuanto a la estabilidad del mercado laboral, , el economista señaló que, aunque la tasa no ha decrecido en términos absolutos, sí ha caído la calidad del empleo. "La opinión pública se ha acostumbrado a mirar sólo la tasa, siendo que la nueva Encuesta Nacional de Empleo, nos entrega más herramientas para mediar su calidad. Lo que vemos es que hay muchos más trabajadores informales, a cuenta propia o a tiempo parcial, que objetivamente, no es gente que esté desempleada, pero no tiene un empleo bueno, si no más bien regular. Esa es un realidad que vamos a seguir viendo, si no se toman las medidas, va a seguir empeorando", pronosticó el economista.