Nació en Italia el 2008, específicamente en la ciudad de Nápoles, transformándose en una idea digna de extenderse por el mundo: comprar un café de manera anónima y por adelantado para una persona de escasos recursos, quien puede retirarlo cuando guste en una tienda determinada.

Y así ha sido, pues el "Café Pendiente" ha llegado a diversos países como Francia, España, Canadá y Estados Unidos. Chile no ha sido la excepción ni tampoco Concepción, donde esta iniciativa ya se ha consolidado entre los habitantes de la ciudad y las comunas aledañas.

El mejor ejemplo es que cada vez son más los locales los que adhieren a la causa y el más reciente es la cadena Starbucks, que hace dos semanas implementó esta iniciativa en sus sucursales de la Región del Biobío ( Concepción, Talcahuano y Chillán).

Se trata de la primera experiencia con esta campaña en Chile, pero de la que ya son parte en los 71 países en los que la marca tiene presencia.

UN REFERENTE

Así lo cuenta Soledad Fantuzzi, gerente de Marketing de Starbucks Chile, quien afirma que lo sucedido en las tiendas del Biobío "han sido un termómetro para darnos cuenta lo solidarios que somos los chilenos, y sobre todo los habitantes de la Región, un verdadero ejemplo para el resto de los chilenos".

Sobre esto, aclara que "a pesar de que es muy poco el tiempo transcurrido como para hacer un balance, la recepción del público ha sido superior a la expectativa, lo que nos tiene muy contentos y con muchas ganas de seguir adelante".

Es por eso que, de cara al futuro, uno de los anhelos, es que esta experiencia pionera para ellos a nivel nacional sea un referente, el puntapié inicial para ir replicándola en las distintas sucursales que tienen en Chile, las que suman en total 93, adelanta Fantuzzi.

En cuanto a lo inmediato, en tanto, la meta de esta primera etapa es fundamentalmente dar a conocer a los habitantes de la Región del Biobío que se está ejecutando este sistema solidario, para que los clientes no sólo se familiaricen con ella, sino que para que también compartan esta acción solidaria.

En ese sentido, la invitación es a hacerse parte de una campaña que ha logrado un impacto mundial, acercándose a las tiendas de Starbucks para saber cómo funciona, y aportar así un granito de arena, con la convicción de que regalar un rico café puede transformarse en una simple manera de alegrar el día a quienes más lo necesitan.