La cooperación mutua siempre es positiva y este plan de colaboración no será la excepción para las partes involucradas; los apicultores y los productores de semillas.

Así quedó comprometido en un documento firmado hace unos días en el Aula Magna de Concepción, por los representes de la Asociación Nacional de Productores de Semillas (Anpros) y la Federación Red Apícola Nacional (RAN).

El objetivo es coordinar, negociar y fomentar acciones sobre temas en común que poseen estos dos gremios.

"Cuando se generó la crisis de transgénicos en mieles de Europa, nos acercamos para conversar y a compartir las miradas, a reconocer espacios en los cuales podemos colaborar y cuáles son los que tenemos que mejorar nuestra relación", dijo Misael Cuevas, presidente de la RAN F.G.

El documento en cuestión implica tres pilares de trabajo. En primera instancia busca capacitar a quienes prestan servicio de polinización para que entreguen un servicio eficiente y de parte de los semilleros, que entiendan la relevancia de las abejas y el cuidado que se les debe prestar. En segundo lugar, se busca levantar información sobre el impacto de las abejas en la productividad de cultivos en nuestro país, y por último, desarrollar una labor de monitoreo y auditar estos protocolos y líneas de trabajo antes mencionadas.

En la ocasión estuvo presente también el director regional de Indap Biobío, Andrés Castillo, quien señaló que "este convenio que se está celebrando permitirá derribar algunos mitos respecto del eje estratégico de estos dos gremios. Creemos que ellos van a ser capaces de definir caminos para abordar diferencias o para desarrollar oportunidades que aparezcan en esta cadena territorial en la que se encuentran".

En representación de la Asociación Nacional de Productores de Semillas, el director, Eduardo de la Sotta, destacó la importancia de este convenio: "Para nosotros es de tremenda relevancia el sector apícola y la labor de polinización que realizan, ya que sin las abejas no podríamos tener las semillas que hoy tenemos".

Con este acuerdo se busca fundamentalmente, el uso medido y protector de nuestro territorio nacional, en beneficio del pueblo nacional.

En la Región del Biobío, hay entre 2.600 y 3 mi 126 apicultores, de los cuáles sólo unos 1.700 están formalizados, es decir, inscritos en los registros.

En noviembre del 2015, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), estableció un primer sistema de registro obligatorio a partir de diciembre de 2016, pero durante el primer semestre de este año, todo apicultor que tenga colmenas tendrá que inscribirse en este nuevo registro y en noviembre reactualizar la información entregada. Es resumen, esto significa que si el productor se inscribió en marzo y declaró 100 colmenas, en noviembre tendrá que informar lo efectivamente en producción.

Esto permitirá tener un mejor conocimiento estadístico de cuántos son efectivamente los apicultores del país.