Cuando hablamos de un género literario como el fantástico, es posible afirmar que la construcción de un universo, del mundo en el que conviven los personajes, se constituye en uno de los mayores desafíos para el escritor. Pero esto no parece ser problema para Alberto Rojas, periodista y escritor, quien prepara, idealmente para este año, su quinto libro de literatura juvenil fantástica.

Todo comenzó en los 90's, con la publicación de La Lanza Rota, historia que se sitúa en el mundo ficticio de Kalomaar, donde también ocurre la siguiente entrega, La Hermandad del Viento, y la actual trilogía en desarrollo, que sigue las aventuras de la pirata Tramey, bajo el nombre común de Las Leyendas de Kalomaar.

Gracias a los piratas, batallas navales y las distintas aventuras que podemos encontrar en sus páginas, Alberto Rojas se ha ganado un nombre en nuestro país con este género. Que de sencillo tiene muy poco. En exclusiva con diario El Sur, Rojas nos cuenta un poco su dinámica de trabajo, sus inspiraciones y las complejidades que tiene dirigir las letras a este género literario.

UN UNIVERSO FANTÁSTICO

- Yo comencé a escribir a los 12-14 años. Escribía cuentos de fantasía, ciencia ficción. La idea de escribir siempre estuvo presente, no así la idea de publicar. Recién en 1995, cuando mi libro La Lanza Rota gana el Premio Marcela Paz, que parte del premio es la publicación. Yo creo que me acerqué al género por las cosas que leía cuando más joven. Pese al precio, siempre busqué las cosas de ciencia ficción, como Ray Bradbury o Arthur C. Clark, y de aventuras me leí casi todo lo de Emilio Salgari y Julio Verne.

- Al principio cree "La Lanza Rota", donde fuera con un tono de aventura, similar a las cosas que había leído. Pero el éxito que tuve con ese libro me llevó pensar en la continuación, que fue La Hermandad del Viento, donde este universo de expandió. Y ahora sigo explorando este universo, con El Medallón del Sol Negro y la Venganza de la Reina, que son una suerte de spin-offs de los otros libros. La protagonista de estos dos últimos, Tramey, era un personaje que gustó a muchos y eso me llevó a escribir su propia historia, que será una trilogía.

- Lo primero es tratar de que este mundo fantástico sea creíble. Suena contradictorio, pero cuando lees algo de fantasía o ciencia ficción, es fundamental que el lector sienta que esto es factible, lógico. Las cosas no pueden ocurrir sin explicación. La idea es tratar de armar un mundo que tenga elementos cercanos. En mis libros existen barcos, puentes, monedas, grupos religiosos, etc.

PÚBLICO Y PROYECTOS

Yo siento que escribo para un público o audiencias contemporáneas. La gente inmersa en el mundo de la televisión por cable, los videojuegos. Su consumo de contenido es muy distinto al público de los años 50 o 60. Mi apuesta es que mis libros sean ágiles, entretenidos, de buen ritmo de lectura, lo que no significa que sean superficiales. En términos categóricos, yo no escribo literatura infantil. Yo creo que mis libros son de 12-14 años para arriba.

- Estoy escribiendo la tercera parte de esta saga. De momento solo estoy trabajando en eso y mi intención es tenerla para fin de año, aunque no puedo estar 100% seguro. No puedo confirmar tampoco el nombre, porque siempre lo pongo al final. Después, creo que haré una pausa con el tema fantástico y me abocaré a algunos proyectos de ficción, que van de la mano con el thriller, que sería mi primera aproximación a ese género.