Muy intranquilos se encontraban los residentes y locatarios penquistas del sector de Plaza Perú al ver que las obras de la segunda etapa de la Rambla en la diagonal Pedro Aguirre Cerda no avanzaba como se esperaba, y las calles se mantenían con excavaciones desde agosto de 2015, cuando se dio inicio a las obras.

Sus sospechas fueron comprobadas durante la semana pasada, cuando sostuvieron una reunión con la Municipalidad de Concepción, entidad mandante del proyecto, donde el director de Construcciones, Domingo Godoy, informó que existía un importante retraso: de un 35% de avance que debería notificarse a la fecha, sólo se alcanza un 18%, dijo.

Y la responsabilidad recayó en la empresa sanitaria Essbio. "Ha habido un poco de demora, bastante en verdad, en base a unos nudos, uniones del cajón de aguas lluvias que va en profundidad, con redes de Essbio que nos hemos topado", explicó Godoy.

Agregó que a pesar de que durante el año pasado se programaron tres cortes de agua -el 29 de octubre, 10 de noviembre y 22 de diciembre-, en ninguna oportunidad se pudo solucionar el problema, que se centra en la intervención realizada en la Diagonal con calle Cochrane.

"Todo servicio que tiene instalaciones en el subsuelo, sus catastros no obedecen a lo real. Nos encontramos con redes que no están ni en su planificación ni en su catastro, y hay que tomar una decisión respecto a la mejor solución, pero no se habían tomado", agregó.

No obstante. luego de una reunión sostenida ayer con representantes de la sanitaria, se logró llegar a un acuerdo. Así, Godoy espera que la obra pueda concretarse en el plazo estipulado, agosto de este año.

COMPROMISO DE ESSBIO

"Tuvimos una reunión con el gerente de Essbio donde le hicimos ver nuestra preocupación por la demora en las soluciones, donde se ha tardado cerca de tres meses, y la acogida que tuvimos fue positiva, ya que van a darle prioridad a este proyecto, cosa que la gente de Essbio, que debe tomar decisiones, pueda resolver a la brevedad posible el problema para no seguir atrasando la obra", explicó Godoy en relación al nuevo rumbo que deberá tomar el proyecto.

Desde Essbio, a través de un comunicado, explicaron que ayer se entregaron al municipio los diseños de ingeniería necesarios para que la construcción de esta infraestructura pueda continuar avanzando, sin dañar una importante tubería que la empresa tiene en ese sector.

La idea inicial era cambiar el trazado de la cañería, no obstante, explicó la subgerenta zonal de Essbio, Ana María Lezcano, "tras infructuosos esfuerzos la empresa determinó que no era posible trasladar la tubería sin tener que generar un masivo corte de agua potable que afectaría a un amplio sector de la ciudad".

Además, dada la envergadura de esta infraestructura se generarían importantes episodios de turbiedad, lo que Essbio quiso evitar.

De este modo, los diseños de la nueva solución consideran el desarrollo de un sistema de protección a la cañería existente, obras consensuadas con el municipio.