Ayudemos a nuestros abuelos
Los directores del Consejo Regional de la Fundación Las Rosas nos hacemos el deber de denunciar ante la opinión pública la crítica situación que vive nuestra institución, luego que del presupuesto 2016 se retirara la partida que debía haber asignado 1.600 millones de pesos para financiar, en parte, la operación nuestros hogares.
La alta edad promedio (82 años) y los índices de morbilidad de nuestros residentes (cada uno de nuestros ancianos tiene en promedio 8 enfermedades crónicas graves), han transformado nuestros hogares en verdaderos hospitales públicos los que, pese a estar sometidos a todas las fiscalizaciones sanitarias, no cuentan con el reconocimiento de las autoridades. Reclamamos ese reconocimiento que, por justicia, les corresponde a nuestros abuelos.
Gracias a un convenio aprobado por la Contraloría, el Ministerio de Salud nos hace un aporte mensual de $10.000 por persona, que es menos de un tercio del que entrega a sus hospitales para atender los días camas de adultos mayores, con el agravante, además, que sólo se lo otorga a 340 de nuestros 2.200 abuelos. Como este año esos aportes aún no han llegado, nos hemos visto forzados a cerrar hogares, disminuir día camas y paralizar grandes proyectos para seguir atendiendo a nuestros abuelos con la dignidad que ellos se merecen.
Somos una institución sin fines de lucro, que vive de la caridad; especialmente de esos miles de generosos donantes que mes a mes nos entregan su generoso aporte. Es la ocasión para entregarles nuestro profundo agradecimiento por su constante apoyo a la Fundación y hacer un nuevo llamado a la conciencia de la comunidad, con el fin de solicitar sus aportes en la colecta que realizaremos entre los días 6, 7 y 8 de noviembre próximos.
Hacemos un llamado a los parlamentarios y al gobierno para que se reponga la partida mencionada al inicio de esta carta, por el bien de la labor de servicio que esta Fundación presta a la sociedad y los ancianos desvalidos a lo largo del país y en particular en esta Región.