Es casi como recorrer sus pasillos, gente, estética y forma. Sin duda, vale la pena ver la exposición fotográfica "Feria de Lota: memoria viva de un mercado popular", que se inaugura hoy, a las 19.30 horas, en Artistas del Acero.

Acompañada de un libro, que se presentará el sábado en el mismo espacio de O'Higgins 1255, la iniciativa financiada por el Fondart Regional 2014, es parte de un proyecto liderado por Luis Manuel Aguirre, Javiera Cornejo y Pablo Gaete, que apunta a rescatar el valor cultural de la ciudad originalmente fundada en 1660.

"Básicamente esta exposición trata sobre el valor de la Feria de Lota como un espacio de patrimonio vivo: a pesar de la depresión económica de la comuna ha logrado mantenerse viva y con un diálogo permanente entre la tradición y lo contemporáneo", explica Aguirre respecto al lugar que funciona en Lota Bajo los 365 días del año.

"Se establece así como un lugar de diversidad, resistencia e intercambio cultural, que se ha sobrepuesto a las condicionantes políticas y sociales de las distintas épocas", acota el gestor cultural y quien registró la mayoría de las 40 imágenes que componen la muestra (algunas pertenecen a Javiera Cornejo). "Las fotografías son producto del trabajo de investigación y estudio patrimonial conjunto", apunta Aguirre.

DARSE UN TIEMPO

El registro fue realizado en el transcurso de los dos últimos años bajo condiciones de luz diferentes. Ello, explicaron, con la finalidad de recrear los matices y colores que tiene la Feria en las distintas estaciones.

- Se focalizó en dos aspectos: la diferencia y el detalle. En este sentido, el trabajo de registro estableció como referencia simbólica la heterogeneidad de los actores, referencias, texturas y cromas. Estos se vieron acentuados por primerísimos planos, de detalle de productos marinos, rurales, costeros, artesanales. Acá se buscó un diálogo entre los actores y productos. Establecimos situaciones de consensos y disensos permanentes entre la materialidad y la interacción de una trama social, que se surge bajo una generación que no conoce reglas ni referencias, sino que convive en un lugar donde todas las miradas son posibles y complementarias.

- Es poner en valor la Feria como un ente vivo que es capaz de superar el tiempo y que como los propios feriantes reconocen al preguntar por la Feria "siempre ha estado ahí". Desde esta perspectiva podríamos decir que congruente con la corriente naturalista de los relatos de Baldomero Lillo, ésta es un personaje inmortal que pese al paso del tiempo y las distintas vicisitudes se mantiene viva y atractiva para todos aquellos que estén en disposición del diálogo y el intercambio cultural y simbólico.

LO PATRIMONIAL

El proyecto se enmarcó en un Fondart Regional en el área de rescate del patrimonio, el cual implica esta exposición y el citado libro (se lanza el 11 al mediodía).

- Está en su diversidad, en lo pintoresco de sus espacios, en el intercambio e interacción con sus actores y comerciantes. O sea, en el sentido de vida que trasmite y en la identidad de cada uno de sus intercambios.

- De ahí se deriva su valor patrimonial.

- El mayor valor patrimonial que posee es el ser un polo de exposición de la identidad local vivo que a pesar de los distintos conflictos y al reciente proceso de cierre y reconversión fallidos, aun se mantiene presente como un gran pulmón dinamizador de la cultura local y como un referente regional.