El calor del sol se sintió hasta hace pocos días, pero el clima otoñal hizo su aparición. Así, frío, lluvia, humedad y sol se transforman en una combinación propicia para que se genere una de las enfermedades típicas de la época: el resfriado común.
Según cuenta Adriana Mansilla, coordinadora de la carrera Técnico en Enfermería de Inacap Concepción-Talcahuano, un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Yale (Estados Unidos), revela que el virus que produce el resfriado común puede reproducirse más eficientemente bajo temperaturas más frías que la temperatura corporal y que se detectan al interior de la nariz. "En las pruebas, observaron que el sistema inmunológico se debilitó en una nariz fría lo que dio al virus más oportunidades de sobrevivencia, pues a temperatura baja los sensores que detectan la infección y los químicos que coordinan la respuesta inmune son menos eficaces", puntualiza.
PREVENIR
Es ante esos resultados que usar ropa de abrigo, que evite el frío pero que tampoco provoque exceso de calor, se vuelve una medida preventiva fundamental.
Pero no es la única. Al respecto, la profesional apunta que es clave lavarse las manos de manera frecuente con agua y jabón, así como también evitarse tocarse la boca, ojos o nariz. Ventilar los espacios es también importante, sobre todo aquellos lugares que son compartir por varias personas y por periodos largos, tal como es habitual en sales de clases u oficinas.
Además, como la exposición al humo del cigarrillo irrita las mucosas de las vías respiratorias y las convierte más permeables a la penetración de virus y bacterias, la recomendación es reducir o evitar el consumo de tabaco.
Así también descansar, hidratarse y hacerse lavados nasales con fuero fisiológico ayuda a prevenir los resfriados, al igual que tomar Vitaminas C. Recalca que tampoco hay que olvidar lo importante que es tener una alimentación saludable. Y es que los alimentos aportan nutrientes y vitaminas que fortalecen las defensas.
ALIVIO
Aunque hay medidas que ayudan a prevenir los resfríos, a veces éstos no se pueden evitar y, lamentablemente, hay que dejar que éste siga su curso, pues el resfriado común no tiene cura. Sin embargo, hay algunas medidas que ayudan a aliviar los síntomas. Una de éstas es mezclar media cucharadita de sal en un vaso con agua tibia y hacer gárgaras durante treinta segundos -alivia dolor de garganta-. Esta solución se puede utilizar en spray nasal o aspirar pequeñas gotas, para ayudar a disminuir la congestión nasal.
El descanso, que es una medida preventiva, también es clave cuando ya se está resfriado, pues le permite al sistema inmune trabajar mejor para combatir los síntomas de esta enfermedad. Por eso, la recomendación es evitar actividades que sean desgastante, quedarse en casa, relajarse, acostarse y mantener el calor.
Los jugos y caldos son las mejores fuentes de electrolitos esenciales, por lo que se deben consumir ante un resfrío, siendo especialmente necesarios cuando el virus ha disminuido su apetito; mientras que la vitamina C ayuda a aumentar las defensas y aceleran la recuperación.