La televisión chilena también regresó de vacaciones y con marzo llegan varias novedades que buscan cautivar al público durante el primer semestre. Allí no sólo hay propuestas que debutan; sino también algunas que ya se echaban de menos en la pequeña pantalla; tal como sucedió el jueves con Vértigo, programa que cada vez parece depender más de la ironía de Yerko Puchento.

Aún así la rutina de Daniel Alcaíno le dio un nuevo aire a Canal 13, estación que pasa por una crisis, incluyendo áreas dramáticas y de realities que estaban un tanto estancadas. Para irse a la segura allí continuaron con la moda de las teleseries turcas, en este caso con "Rosa Negra" a las 17.30 horas. La producción trata sobre una mujer que es abandonada por su marido y que debe hacerse cargo de sus tres hijos.

Pero allí también se arriesgan con una producción propia, la serie "Príncipe de Barrio", la cual ficciona sobre la vida de un ídolo deportivo. La producción, que inició su rodaje los primeros días de marzo, nació de una idea del dramaturgo Luis Barrales, quien trabajó el proyecto en conjunto con el director Sebastián Araya y en asociación con Canal 13.

Tras postular a los fondos del Consejo Nacional de Televisión en 2013, se adjudicaron más de 400 millones de pesos, que hicieron posible hacer realidad lo que en algún minuto parecía un sueño. "La idea cambió bastante de la original, pero mantiene la esencia, que es contar la historia de un muchacho que parte jugando en un equipo muy humilde de un barrio periférico chileno, y gracias a su talento avanza hasta jugar en un equipo de Primera División e incluso en la Selección", contó Sebastián Araya.

El director de "Azul y blanco" afirma que a lo largo de los doce capítulos intentarán mostrar "qué pasa con esos muchachos cuando llegan a un equipo grande, qué pasa en su realidad social y económica, y cómo les cambia la vida. Ahí está el corazón de esta serie".

En cuanto a la entretención, hoy debuta Diana Bolocco como nueva conductora de "Atrapa los Millones". La dinámica continúa basada en que los concursantes utilizan un fondo de 100 millones de pesos (antes eran 400 millones) para apostar por la respuesta correcta a las distintas preguntas que se les realizan. Avanzan en la competencia siempre y cuando les quede dinero disponible, y el premio final será la cifra que mantengan tras la última pregunta.

BOOM ES LA NOVEDAD

Los programas de concursos anuncian una pelea sin tregua entre Canal 13 y TVN, y es que en la estación pública hoy estrenan "¡Boom!", versión local de una licencia internacional que en países como España ha tenido gran éxito por su dinámica tan entretenida como llamativa, pensada para un público familiar.

Conducido por José Miguel Viñuela, el programa pone a competir a dos equipos de cuatro personas que deberán desactivar una serie de bombas. ¿Cómo? Respondiendo correctamente las preguntas de conocimiento que se les realizan y a través de las cuales van acumulando dinero. Cada pregunta es una bomba y la forma de desactivarlas es cortando los cables de colores que representan únicamente las alternativas incorrectas.

Si se equivocan o se demoran más de un minuto en completar la misión, la bomba les explota literalmente en la cara -y de forma muy divertida-, pierden a un integrante del grupo y parte del dinero ya ganado, y ceden su turno a los contrincantes.

"¡Boom!" se desarrolla como una vertiginosa competencia de tres rondas: En la primera deben desactivar un total de ocho bombas, mientras que en la segunda se realiza un "duelo" que enfrenta a sólo un concursante por equipo, quienes tienen 15 segundos para responder cada una de las diez preguntas que se les realicen.

El ganador de esa fase pasa a la etapa final en la que deben desactivar una "bomba dorada". Si lo logran, se llevan 70 millones de pesos (piso base). Si fallan, se van con lo reunido al comienzo y la posibilidad de regresar en el próximo capítulo para seguir compitiendo por el gran premio, cuya cifra de 70 millones suma 500 mil pesos por cada episodio en que no haya ganador.

PROPUESTAS DRAMÁTICAS

Esta tarde TVN además presenta "Somos Familia", una teleserie producida por Telefé que cuenta con la actuación protagónica de la exitosa actriz colombiana, Ana María Orozco ("Betty La Fea"), el regreso a la televisión del argentino Gustavo Bermúdez y el chileno Augusto Schuster, quien se ha destacado en el exigente mercado trasandino.

Estrenada en 2014 en Argentina, "Somos Familia" comienza cuando la vida del soltero seductor y exitoso empresario, Joaquín Navarro (Gustavo Bermúdez), da un vuelco inesperado al tener que hacerse cargo de los cuatro hijos de su mejor amigo, cuando él y su mujer mueren en un accidente aéreo.

"Esta teleserie cuenta con elementos novedosos para la audiencia y también es capaz de atraer a un público joven por las temáticas e historias de algunos personajes que serán de interés para ellos", sostuvo la productora ejecutiva de Programación Extranjera de TVN, Isabel Rodríguez.

Enese canal además ya iniciaron las grabaciones de "Matriarcas", teleserie que tendrá un reencuentro televisivo esperado por muchos, ya que finalmente Francisco Reyes y Claudia di Girolamo se unen en esta producción en tono de comedi.

El área dramática además espera generar un alto impacto con su serie "Zamudio", basada en el comentado crimen de discriminación que sacudió al país. La producción de cuatro capítulos mostrará todo el caso del brutal homicidio, además de contar sobre la vida del joven Daniel y brindar algunas moralejas sobre la sociedad en que vivimos.

EL RESTO APORTA POCO

Por ahora Chilevisión no ha mostrado muchas novedades, salvo el regreso de "Talento Chileno", donde esta temporada habrá varios exponentes de nuestra Región. Mega, por su parte, sigue apostando por las teleseries de oriente. La producción turca "Sila" relata la vida de una mujer que en su infancia fue vendida por su padre a una familia de millonarios.

Después de varios años, su padre biológico vuelve a buscarla, aunque no con buenas intenciones. Otro de sus hijos intentó huir junto a una mujer y fue sorprendido por el hermano de ésta, Boran (Mehmet Akif Alakurt), por lo que deberá pagar tal hazaña con su vida. Las estrictas costumbres del pueblo indican que la única forma de salvarse de la muerte es entregando a su hermana en matrimonio. Así, Sila es obligada a casarse con Boran, un hombre que recién conoce.