Será mañana cuando María Cecilia Romero (44) llegue nuevamente hasta el Congreso Nacional en Valparaíso en la senda de encontrar la solución definitiva en el caso de su esposo, Ricardo Landeros Bustos (49).
La idea es entrevistarse con la Cámara de Diputados, con el fin de que los parlamentarios, tal como ya lo hicieron sus pares senadores, aprueben un proyecto de acuerdo con el que solicitarán una mediación del Ministro de Relaciones Exteriores (RR.EE) con la República Bolivariana de Venezuela, donde desde diciembre de 2013 cumple pena carcelaria de más de 25 años.
DE CHILE A VENEZUELA
La situación de Landeros ha levantado atención tanto en Chile como en el mismo extranjero.
La historia se remonta al año 2007, cuando el ingeniero forestal junto a su esposa María Cecilia Romero (de segundo matrimonio) llegan a Venezuela, donde toma la Dirección de Operaciones de la sucursal de Masisa en ese país.
Una vez establecidos en Puerto Ordaz (estado de Bolívar), María Cecilia llegó hasta el hogar de menores "La Cigüeña" con el fin de donar alimentos.
Ante el escenario copado de menores sin familia es que la mujer mostró su interés en adoptar a un menor de 12 años llamado Josué, cuestión que comenzó a gestionar por medio de la directora del hogar, Yazmín Maurera Rivas, quien solicitó una serie de documentos que incluía el estado financiero de Ricardo.
Si bien la adopción del niño no se concretó, a la larga Maurera Rivas informó sobre la situación de dos niñitas, bebés, punto que llegó a buen puerto.
La familia iba tomando forma. Las pequeñas María Matilde y María Teresa eran luz dentro de la casa. A los Landeros-Romero al parecer les seducía la idea de que el clan debía incrementarse... La idea terminó con un vuelco radical en sus vidas y el inicio de la historia de "El Chileno".
"EL CHILENO"
Septiembre de 2013 y desde "La Cigüeña" se ponen en contacto con el ingeniero para comunicarle la posibilidad de una tercera adopción. El matrimonio dice que sí de forma inmediata... sería una tercera niñita.
La nueva hija sería entregada por la misma Yazmín Maurera Rivas, en la ciudad de El Tigre.
Una vez en el peaje de la comuna, el relato tomó otro tono.
No fueron abrazos ni sonidos de llanto los que envolvieron su entorno, sino un equipo de la policía local perteneciente al Comando Anti Extorsión y Secuestro (GAES), quienes bajan de manera inmediata de su vehículo al hombre.
De acuerdo al relato entregado por el mismo Landeros, los uniformados lo tomaron detenido y lo someten a interrogatorio. En esos capítulos incluso se acusa de que hubo torturas.
-"¿Conoces a Leomar Jesús Barrero Dicuru? (detenido junto a él)",
-"¿Conoces a Yazmín Josefina Maurera Rivas?" .
Aquella respuesta terminó con el ingeniero en medio de un juicio donde fue acusado del delito de trata de personas, cuestión que de acuerdo a los antecedentes policiales en medio de su detención, se habrían sustentado en que aquella tercera hija que adoptarían los Landeros-Romero había sido robada por Barrero y Maurera.
Desde ahí que Landeros está en la cárcel venezolana, donde funcionarios y otros privados de libertad lo conocen como "El Chileno".
Hoy, su esposa se encuentra realizando todas las gestiones para que la condena de Ricardo sea revocada. "Me reuní con la Comisión de RR.EE de la Cámara de Diputados y la Comisión de DD.HH en el Senado, con ello los senadores de manera unánime dieron pie al proyecto de acuerdo, el que ahora buscaré que se repita a nivel de la Cámara Baja".
Pues el boletín S 1.787-12 de la citada Cámara determinó que la "Embajada en Caracas se responsabilice de asegurar el debido proceso judicial y la asesoría legal necesaria para establecer su inocencia; a la vez, comprometer la voluntad de esta Corporación legislativa para encomendar a una comisión de parlamentarios de ambas ramas del Congreso Nacional acciones conducentes a obtener el más pronto retorno de Landeros".
Al ser consultada la esposa de Landeros sobre qué le pasó a la niña que iban a adoptar, María Cecilia Romero respondió que no sabía nada: "Por lo que he leído y han comunicado los abogados al parecer está con su mamá. De hecho, nunca supimos como se llamaba y mi marido ni las conoció.