Bicicletas, computadores, patines, celulares y juegos electrónicos son algunos de los regalos que más se repiten entre las cartas dirigidas al Viejito Pascuero, donde las tablet son, por lejos, los favoritos indiscutidos.

Más de cien cartas repetidas, direcciones que no aparecen y datos que no coinciden con los domicilios son algunas de las situaciones que hacen que una carta no pueda ser puesta a disposición del público. Sin embargo, lograr un proceso limpio no es fácil y cada es eslabón es clave para esto. Todo comienza con la recepción de cartas en el buzón, las que son llevadas donde un grupo de señoras que se encargan de revisarlas, leerlas y prepararlas para ser despachadas a la sala de carteros, quienes van a los domicilios y validan las cartas.