Máquinas de juegos
Un grupo de senadores y diputados han presentado un proyecto de ley destinado a establecer un marco legal que regule el funcionamiento de las máquinas de juegos o tragamonedas que operan en algunos locales comerciales.
Se pretende con ello normar una actividad que, según la Asociación Gremial de Fabricantes e Importadores de Entretenimientos Electrónicos (Fiden), se desarrolla en 1.250 salas, con unos 705 mil aparatos. El anteproyecto de los parlamentarios, que esperan sea patrocinado por el gobierno, establece que sólo se normarán aquellas máquinas de juego programado, las cuales se diferencian de las de azar, porque el premio depende de una secuencia de combinaciones.
Para poder operar, deberán contar con la autorización de la Superintendencia de Casinos de Juego, que les exigirá estar inscritas en el registro de homologación. Para ello, deberán tener certificados que acrediten el cumplimiento de requisitos técnicos y deberán conectarse a un sistema de monitoreo en línea para corroborar su fiel cumplimiento de la legislación.
Las máquinas de juegos son una realidad y se multiplican en el centro y en los barrios de las principales ciudades. En Concepción, la gobernadora Andrea Muñoz asegura que se ha conversado con la Federación Regional del Comercio y Turismo, con el fin de abordar algunos conflictos que se presentan con esta actividad. Es evidente que para muchas personas de escasos recursos estos juegos de transforman en un vicio que no pueden dejar (ludopatía), y que esta actividad no está suficientemente regulada como los casinos formales. Del mismo modo, es frecuente que estudiantes falten a clases con el fin de visitar estos locales, y a juicio de la autoridad, en ocasiones se consumen sustancias prohibidas.
A juicio de la gobernadora, se conformará una mesa de trabajo para abordar el tema junto a la Municipalidad de Concepción, que otorga las patentes, más los dirigentes de la Federación de Comercio y Carabineros.
La iniciativa parlamentaria propone que las salas de juego cuenten con un máximo de 80 tragamonedas populares o una máquina por cada 1,5 metros cuadrados de la superficie útil del inmueble. Sólo podrán operar en zonas que, de acuerdo con el Plan Regulador Comunal, permitan el equipamiento comercial o de esparcimiento y no podrán ubicarse a menos de 100 metros de los colegios.