Expertos aconsejan cotizar en las distintas casas bancarias y fijarse en la cuota final.
Uniformes, colegiaturas, el pago de patentes, seguro obligatorio, la compra de los útiles y el regreso a clases en general, suelen ser algunos de los gastos asociados a marzo, mes en donde muchos se ven obligados a solicitar un crédito de consumo para costear estas necesidades, e incluso pagar otras deudas.
En esta materia, algunos expertos han apoyado la solicitud de préstamos, que en definitiva, permitan "ordenar" los gastos de los consumidores, reagrupando todas las deudas, ya sea con casas comerciales o bancos, en una sola cuota.
Pero, ¿cómo saber cuál es la mejor opción? Al igual que para el consumo de otros productos, ¿es necesario cotizar?
Según Rodrigo Nahuelcura, director regional del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), existen diversos estudios que indican que entre los diversos proveedores existen diferencias. "Sabemos que es mucho mejor pedir un crédito que recurrir al avance en efectivo, independientemente si se haga a través de un banco o una caja de compensación, por ejemplo", sostuvo.
En este caso, agregó, es donde cobra relevancia la Carga Anual Equivalente (CAE), pues es el factor que permite comparar el crédito más barato y la opción más conveniente.
En materia de derechos al consumidor, el representante regional del Sernac detalló la obligación por parte de las casas financieras a informar sobre factores como tasas de interés, gastos de mantención, el CAE y el costo total del crédito, entre otras variables.
"Las personas tienen el derecho de solicitar una cotización a cualquiera de las instituciones financieras, con una validación de siete días para decidir cuál es la oferta más conveniente para todos los consumidores", indicó.
"PUEDE SER CONVENIENTE"
En tanto, el economista de la Universidad del Bío Bío, Ariel Yévenes, sostuvo que solicitar un crédito "tal vez resulte conveniente, en la medida que se cuente con un ordenamiento financiero que influya un flujo de ingresos programable y estable durante el año".
Así, agregó, es posible consolidar los gastos extraordinarios tradicionalmente involucrados en este mes en una deuda pagadera durante todo el año. "Sin embargo, tal vez, de ser posible, siempre lo mejor será programar esos mismos pagos como una forma de ahorro y contar con ello para marzo siguiente; pero se entiende que esta condición de ahorro es bastante difícil para la gran mayoría de familias", afirmó.
Al igual que el director del Sernac, Yévenes recomendó hacer las comparaciones en función de la cuota más baja, que comparativamente sobre la base de igual número de cuotas, "sigue siendo la información que nos llega en el lenguaje más sencillo".
Por último, el economista comentó que solicitar un crédito tal vez resulte conveniente, pues "sería posible consolidar todo en una deuda pagadera durante todo el año".