¿Habrá llegado el momento de ver por fin a Lucía López?
El arribo de Lucía López a Chilevisión es un claro signo de los tiempos televisivos por la que actualmente transita la señal abierta. Después de casi dos años al frente de "Alfombra roja" en Canal 13, la periodista penquista de 40 años regresa a la que fue su casa televisiva hasta 2010, cuando sonaba su presencia en el panel de "SQP".
Incluso, sus intervenciones en "Intrusos", antes de ser fichada por el ex canal católico, proyectaban a una mujer con estampa y presencia televisiva. Si algo distinguía a López era la estructuración de intervenciones con algo de contenido, aunque el tema hubiera sido "farándula". En este nicho, ciertamente, cualquiera puede tener algo que decir.
Pero López era diferente. Pintaba para bien, para convertirse en un "rostro" y no ser el personaje secundario de la esta puesta escena. Precisamente, es lo que le ocurrió con su llegada al 13 el 2011. Primero "Bienvenidos", para luego ser conductora de "Alfombra Roja", desde el 9 de noviembre de aquel año. A su lado estaba Cristián Pérez, quien finalmente se convirtió en el principal rostro del franjeado de la tarde.
CÓMO FUE
En estos terrenos, Lucía aguantó estoicamente compartir opiniones -digamos- con panelistas de una simpleza atroz, partiendo por Dominique Gallego y, muy especialmente, Paulina Rojas. A todas luces, ésta última -eterna notera de la pantalla- expresaba un discurso/subtexto, donde casi no aparecía ni era aludida la verdadera conductora del programa.
Contra aquellas presencia, López dio un paso al costado. Pero no por contenido/discurso, sino por cámara, plano y presencia en el set.
Finalmente, lideaba con panelistas todos que transformaron "Alfombra roja" en una mera contienda de egos injustificados, hoy día al aire en el irrisorio horario de las 17.20 (hasta hace dos semanas iba en el bloque de las siete de la tarde)
Desde la producción ejecutiva (Bibiano Castelló) y dirección (Rodrigo Súnico) del programa nunca cuidaron a la penquista, guiándola por el camino que implicaba ser rostro y conductora (a eso se llama dirigir).
El signo de los tiempos, nuevamente, los resultados rápidos, sin fundamentos, llevó a esta profesional titulada en la UDD Concepción (1997) aceptar y negociar su regreso a CHV.
LO QUE VIENE
Desde la primera semana de enero veremos a López al frente de "Primer plano", al aire desde 1999, decano de los espacios de farándula. Lamentablemente, actualmente convertido en una sopa de letras de contenidos sin brillo e interés. Incluso, pensando en esa cuestión morbo/voyeuristas tan propio de estas apuestas.
Lucía López puso fin su estada en el 13 -también es factible que regrese en un tiempo más- seducida por el "primer plano" que, efectivamente, implica su pase al estelar. Sin embargo, ahí también deberá lidiar con egos no menores (pero masculinos). A su lado tendrá a Cristián Sánchez, siempre y cuando Francisca García-Huidobro esté en el "off" (fuera de cuadro). O sea, desarrollando otros proyectos, como fue anunciado hace unos días.
Entonces, y siendo honestos, Lucía no arriba a su nueva casa para conducir un programa. Nuevamente está para la reserva en un estelar hecho a la medida de García-Huidobro. Cuando aparezca la titular, la penquista tendrá que volver a su rol de panelista. Y así durante todo el año, hasta que haya un nuevo giro en este guión.
Quizás, la diferencia acá sea su compañía. Ojalá Sánchez no la sienta una competencia, sino un complemento al aire. Allí será misión de productores y ejecutivos potenciarla de verdad, sin que nadie se sienta pasado a llevar, menos la titular de esta cartera televisiva.
Finalmente, y en eso Lucía ha desarrollado su rol de periodista, la carta penquista podría ser un aporte al "texto" del prime, dependiendo eso sí, del "contexto" en el cual se desarrolle y exponga.