Brigadas voluntarias atienden a los heridos en las protestas
Una cruz roja sobre una banda blanca en el brazo o en el pecho. Ese es el distintivo que profesionales y estudiantes de la salud están usando para que las personas lesionadas en las manifestaciones se acerquen a recibir primeros auxilios.
El importante número de personas lesionadas en las marchas, algunos de gravedad, debido al actuar de fuerzas policiales y militares, llevó a personas del área de salud a autoconvocarse voluntariamente a través de redes sociales para formar brigadas que se preocuparan de atender a los heridos que se registran en las manifestaciones.
Estas personas, que han actuado principalmente en Concepción, se separan en pequeños grupos, de tres o cuatro miembros, observan y caminan al lado de los manifestantes o gritan a viva voz para saber si alguna de las personas que participan en las marchas requieren una atención de primeros auxilios.
Los principales elementos para atender a las personas afectadas son suero fisiológico, apósitos, gasas estériles, tela adhesiva, bicarbonato, entre otras. Estas las obtienen con sus propios recursos o por insumos que le aportan sus facultades o aportes de personas que saben el trabajo que están haciendo.
BRIGADAS
Una de los grupos que se formó para realizar esta labor es la Brigada de Salud Concepción que la conforman profesionales titulados y estudiantes de las carreras del área de salud.
Fátima Acuña, enfermera y coordinadora del grupo, contó que actuaron porque vieron habían una gran cantidad de heridos y nadie que los asistiera, a los más, un poco de ayuda de los propios manifestantes.
"Vamos vestidos principalmente con uniformes de la carrera a la que pertenezcamos y, además, con un distintivo que es una cruz roja sobre banda blanca en lugar visible (…). Hicimos la difusión para que ese logo es el que buscarán si estaban heridos", expuso Acuña.
La coordinadora recordó que la primera intervención que hizo el grupo -en el que hay cerca de 130 personas de las cuales al menos 50 están activamente en todas las movilizaciones- fue en la marcha del lunes 21 de octubre.
Contó que ese día atendieron a más de 120 personas, la mayoría por perdigones o quemaduras provocadas por bombas lacrimógenas que les llegaban al cuerpo o debido a cortes y golpes.
"Nos dimos cuenta (los brigadistas) que muchas personas, de no haber recibido la atención que les brindamos, habrían quedado bastante más graves", expuso Acuña.
Carolina, miembro del centro de estudiantes de Medicina de la Universidad de Concepción y que participa en la brigada que formó la carrera -reúne a cerca de 40 alumnos-avaló lo expuesto por Fátima y opinó que lo más grave, es ver que las fuerzas policiales no estarían midiendo su accionar.
"Lo que más me llamó la atención es que asistí a personas con perdigones en la cabeza. Y qué significa eso; que no están disparando hacia los brazos o las piernas", expuso la estudiante de Medicina.
La dirigenta estudiantil agregó que la principal labor que realizan con las personas lesionadas es que las heridas provocadas no se infecten o evitar que sigan sangrando.
"Es generar la primera atención para disminuir el riesgo de complicaciones que puedan tener", sostuvo la joven, que manifestó que la atención que están realizando ha sido valorada por las personas.
Estas acciones también se unen al trabajo que la Cruz Roja también ha realizado activamente, especialmente en el centro penquista.