Académicos patentan adhesivo para madera en Estados Unidos
Los investigadores Mario Núñez Decap, Julio Alarcón Enos y Aldo Ballerini Arroyo son los responsables de lograr la primera patente en Estado Unidos de la Universidad del Bío-Bío, gracias a su iniciativa consistente en un adhesivo para madera.
Este resultado fue fruto de un trabajo coordinado con la Oficina de Transferencia y Licenciamiento, OTL-UBB de la Dirección de Innovación de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado de la Universidad del Bío-Bío. Un hito para la universidad que fue resaltado por sus autoridades.
El investigador Mario Núnez, académico del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental, quien lideró esta investigación relató, que el origen es el estudio que realizó para la tesis de su doctorado, consistente en fabricar un adhesivo para madera basado principalmente en proteínas de origen microbiano, donde se trabajó con tres cepas de levaduras.
Desde esta levadura se extrae la proteína que permite finalmente crear este adhesivo que puede ser usado en cualquier material en base a madera. Esta investigación contó con el apoyo de los académicos Julio Alarcón, del Departamento de Ciencias Básicas y Aldo Ballerini, del Departamento de Ingeniería en Maderas.
La vicerrectora de Investigación y Postgrado, Dra. Gipsy Tabilo, felicitó al equipo de investigadores por este resultado y reafirmó el compromiso de esta repartición institucional por apoyar el fomento a la protección intelectual, la investigación científica y el emprendimiento.
Núñez relató que los fondos para su patentamiento fueron obtenidos a través de dos proyectos relevantes para la Universidad, en los que se involucró, el primero fue el Convenio de Desempeño de apoyo a la Innovación en Educación Superior, del Mineduc (CDInES), que permitió iniciar el proceso a nivel nacional y PCT (tratado internacional de presentación" de solicitudes de patente), luego con el proyecto MacroFacultad de Ingeniería Chile-UBB para la parte internacional, donde se seleccionó presentarlo en EE.UU. Una gestión llevada a cabo por Andrea Bustos, coordinadora de la OTL-UBB, junto a la empresa Villaseca Abogados.
El doctor Mario Núñez se mostró satisfecho con la posibilidad de haber presentado y conseguido esta patente en EE.UU: "Esto es un hito importante para nosotros como grupo de investigación, porque no tenemos experiencia de lo que puede significar esto. Y además es también un gran logro para la universidad, porque la posiciona a nivel internacional con esta temática a través de su Oficina de Transferencia y Licenciamiento", acotó.
Agregó hay una valoración y orgullo personal al saber que lo que se ha investigado tiene utilidad para otros, además de abrir posibilidades para seguir buscando apoyos para que esta iniciativa escale a nuevos escenarios, tanto comercial como de apertura a otros países.
TRABAJO EN EQUIPO
El académico y doctor Julio Alarcón, del Departamento de Ciencias Básicas, complementó que este resultado fortalece el trabajo realizado y robustece al equipo involucrado. "Lograr una patente es la consolidación de un trabajo, pero también permite mostrar la capacidad inventiva que tiene el grupo de académicos que desarrollaron el producto patentable, sobre todo en un mercado tan competitivo como Estados Unidos", argumentó.
El Dr. Alarcón prevé una amplia proyección y beneficios asociados a esta patente: "Supone una ventaja competitiva. Las patentes ofrecen la titularidad y un derecho exclusivo de explotación otorgado por el Estado al inventor por un periodo. Por otro lado, a través del registro de patentes se obtiene la única herramienta legal efectiva frente a la copia, en otras palabras protección a la invención.
También ser titular o inventor de patentes tiene un especial valor y reconocimiento curricular y académico, lo que debe tenerse igualmente en consideración", sella el investigador.
Por su parte el académico Dr. Aldo Ballerini, del Departamento de Ingeniería en Maderas, subrayó el buen nivel de la investigación de la UBB, capaz de llegar a países con altos estándares de exigencia y rigurosidad.
"Es relevante ya que en Estados Unidos el concepto de patente es amplio e incluye todo lo nuevo que se pueda crear, considerando, además, su utilidad. Es un sistema estricto y muy riguroso en el análisis de las solicitudes de invención. Por lo tanto, el lograr una patente en ese país es una señal importante del nivel de desarrollo y originalidad de la investigación que se realiza en nuestra Universidad del Bío-Bío y un incentivo a la creatividad y a la innovación en beneficio de la sociedad", afirma el académico.
Añadió que "esto nos permite proteger el trabajo investigativo realizado en nuestros laboratorios en término de las metodologías utilizadas y los resultados obtenidos, evitando copias y plagios.
PASO IMPORTANTE
La coordinadora de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento de la Universidad del Bío-Bío, Andrea Bustos, se manifestó feliz de lo alcanzado con esta patente en EE.UU. y lo entiende como un paso importante a la internacionalización de los desarrollos científicos tecnológicos que impulsa la Universidad.
Andrea Bustos destacó el proceso vivido de esta investigación, la que fue escalando internamente a través de proyectos patrocinados por la Universidad en busca de su maduración y despliegue. Lo que se materializó con la obtención de esta patente en EE.UU.
El trabajo realizado por la OTL-UBB a la fecha -concluye la profesional- ha estado centrado en potenciar la labor de los investigadores en analizar sus resultados de investigación como un producto o servicio que pueda generar impacto en la sociedad.
"Estos resultados nos permiten posicionarnos en el medio como una universidad activa en I+D y que genera soluciones que requiere la sociedad a través de la transferencia tecnológica", finalizó.