Un hecho alarmante se dio a conocer recientemente en Colombia, tanto, que no debe dejar indiferente a ningún país: en todas las regiones del mundo la biodiversidad está disminuyendo y reduciendo de manera significativa la capacidad que la naturaleza tiene para contribuir al bienestar de las personas en todo aspecto, desde la economía a la seguridad alimentaria y la calidad de vida.

Esto fue expresado en la sexta Plenaria de la Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (Ipbes) , que tuvo lugar entre el 17 y 24 de marzo en Medellín, como una de las impactantes conclusiones a las que se llegó luego de tres años de una investigación global que buscó evaluar el estado actual, amenazas y futuro de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos de cuatro macrozonas: América, Asia y el Pacífico, África, y Europa y Asia Central. El objetivo es incidir en las políticas públicas.

Los estudios fueron realizados por 550 expertos de más de 100 países, y los resultados aprobados por Ipbes, que entre sus 129 Estados miembros tiene a Chile, que participa a través del Ministerio de Medio Ambiente (MMA). El trabajo científico contó con la participación de tres chilenos, uno de ellos Anibal Pauchard, director del Laboratorio de Invasiones Biológicas y profesor de la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Concepción, e investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad, quien lideró la investigación sobre especies invasoras en América en el capítulo de amenazas a la biodiversidad y servicios ecosistémicos.

SERVICIOS ECOSISTÉMICOS

El informe contiene conclusiones por continente y algunas se subdividen por eco regiones, según criterios como zonas climáticas. Pero, hay situaciones o fenómenos transversales. Uno de los balances que cree relevante es que "debido a que la biodiversidad aporta beneficios que no están cuantificados por las personas, mucha gente asume que la biodiversidad y los servicios ecosistémicos no tienen impacto sobre el ser humano, cuando en realidad son sumamente trascendentales".

Sobre esto, precisa que se acuñó el concepto de "beneficios que la naturaleza provee al ser humano", de tal forma de resaltar su enorme impacto. "Los beneficios son múltiples: proveer de agua, polinización, producción de elementos químicos que puedan servir como fármacos, estabilidad ecosistémica en términos de control de los ciclos hídricos y por ende de fenómenos como sequías e inundaciones, o control de plagas por parte del bosque nativo, entre otros. Todo lo que uno da por hecho, pero si no protegemos estos servicios, empiezan a declinar", detalla Anibal Pauchard.

LA MANO DEL HOMBRE

Los servicios ecosistémicos inciden en distintos niveles de la actividad humana, al mismo tiempo que la acción del hombre es uno de los grandes responsables de los problemas que se están enfrentando y que tienen proyecciones tan nefastas como la extinción de especies, y con ello todos los efectos sobre el planeta y personas; no en vano Robert Watson, presidente de Ipbes, dijo que "los humanos estamos socavando nuestro futuro".

Al respecto, Pauchard destaca que existen forzantes naturales que afectan la biodiversidad y servicios de los ecosistemas, como el vulcanismo, que son inevitables. No obstante, dice que la huella humana sobre la biodiversidad ha aumentado exponencial y preocupantemente en los últimos 50 años (más de 200%). Por eso, así como analizar cómo el humano ha afectado la biodiversidad, el investigador sostiene que se busca "tomar decisiones adecuadas y no seguir dañándola, sino recuperándola donde se pueda y ver qué acciones son las más adecuadas para aumentar los beneficios de la naturaleza para el hombre".

En América, entre las amenazas a la biodiversidad están el cambio en uso del suelo, la deforestación, la destrucción de hábitats, la sobreexplotación de recursos, la contaminación y la llegada de especies invasoras. Todo potenciado con el cambio climático, por eso Ipbes y la investigación están en sintonía al trabajo del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).

INVASIÓN EN ECOSISTEMAS

Las especies invasoras, explica, "son las que el hombre ha llevado de un lugar a otro, sea intencionalmente o por accidente. Algunas, una porción pequeña, se vuelven altamente abundantes y empiezan a producir impacto. Es lo que se llama plaga o maleza, especies que han disparado sus poblaciones más allá de los límites adecuados y empiezan a producir problemas". Para su investigación se estudió la flora y fauna desde Alaska hasta Tierra del Fuego.

Afirma que "en todos los ecosistemas, las especies invasoras son un forzante más que interactúa con el cambio climático para afectar la biodiversidad y reducirla", advirtiendo que "con el aumento de la cantidad de gente desplazándose de un lugar a otro, comercializando, va a empezar a haber mayor cantidad de especies invasoras". En Chile y la Región del Biobío, asevera Anibal Pauchard que "hay alto nivel de invasión de especies. Tenemos especies invasoras como el aromo, los ratones de ciudad son plaga, el castor y la chaqueta amarilla".

MEDIDAS Y DESAFÍOS

Aunque es alarmante, el experto destaca que aún es tiempo de preocuparse y actuar con medidas como no dar permiso para que entren nuevas especies y evitar las entradas accidentales. "También hay que generar planes de manejo para controlar las que tenemos como especies invasoras. En esto estamos trabajando en la Facultad de Ciencias Forestales UdeC junto al MMA, Conaf y SAG", c0menta.

En ese sentido, recalca que el MMA como miembro del Ipbes tiene la responsabilidad de considerar las conclusiones del informe y generar estrategias, pues la primordial meta es que este esfuerzo global lleve a todos los Estados a avanzar por el mismo camino, tal como ha sucedido con los acuerdos suscritos en relación al cambio climático. No obstante, para incidir y generar políticas públicas efectivas, tiene certeza que hay otro reto, apuntando que ahora es sumamente lo que se requiere es dar un paso como país y realizar un informe detallado sobre la realidad nacional y así lograr ejecutar acciones específicas y adecuadas al territorio de Chile.