Golpes y malos tratos a internos que tienen una orientación sexual e identidad de género diferente denunció el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh). Según la organización, esto está ocurriendo al interior del Centro de Cumplimiento Penitenciario del Biobío.

La situación que se acusa habría sucedido el 4 de enero cuando al menos tres gendarmes habrían denostado a dos internos -uno transexual y otro homosexual- que se encuentran en el módulo 88 del recinto.

El presidente nacional del Movilh, Ramón Gómez, detalló que esa agresión verbal, que después se tradujo en física en contra de uno de las dos personas privadas de libertad, se debió a denuncias previas y ocurridas en otro recinto penitenciario.

Los denunciantes habían sufrido una situación similar en la cárcel de Antofagasta, la que los llevó a recurrir a la justicia, la que determinó en un fallo de la Corte Suprema que se les derivara a un espacio donde se les garantizara mayor igualdad de derecho. Es en ese contexto que llegaron al Penal Biobío, en donde acusaron un nuevo maltrato.

"Lo que está sucediendo es grave, porque es gente que ya está protegida por fallos de la justicia. Lo que está haciendo Gendarmería no es solamente incurrir en ataques de tipo homofóbicos y transfóbicos, sino que además está violentando lo que tribunales le ha exigido que cese, que es este tipo de atropellos", enfatizó el presidente nacional del Movilh.

Gómez expuso que esta es una práctica que se da en todos los penales del país. El Movilh informó que sólo en 2017 se conocieron 13 casos de discriminación y torturas contra internos e internas por su condición se orientación sexual o identidad de género.

"El mensaje que quieren dar estos gendarmes es que nadie está protegido. Una de las formas de decir que no hay protección es volverlo a insultar por orientación sexual e identidad de género", recalcó Ramón Gómez.

GENDARMERÍA

Con respecto a la situación que denuncia el Movilh, Gendarmería del Biobío preció que no existen denuncian formales en la institución, pero informó que la situación que se derivó de un procedimiento de registro y allanamiento es investigado de forma interna, a fin de establecer "claridad sobre los hechos y revisar de ese modo el adecuado actuar del personal sobre el principio de respeto a los derechos humanos".

Asimismo la entidad, expuso que se entregaron oportunamente los antecedentes al Ministerio Público, como asimismo al Instituto Nacional de Derechos Humanos y a la Defensoría Penal Penitenciaria para transparentar el procedimiento.

La institución también confirmo su compromiso irrestricto con el respeto y protección de los derechos humanos, lo que incluye a grupos de diversidad sexual. Aseguraron que en el periodo 2016-2017, Gendarmería Biobío capacitó a 1.800 funcionarios de trato directo con la población penal en materias relacionadas.

Desde el Movilh si bien reconocieron que se han ejecutado estas acciones, alegaron que a la luz de los hechos, estas capacitaciones no se traducen en buenas prácticas.

El presidente del Movilh comentó que envío una carta al director nacional de Gendarmería, Jaime Rojas, expresando su repudio por lo ocurrido y exigiendo medidas inmediatas. Además, se solicitó al director del Instituto Nacional de Derechos (Indh), Branislav Marelic, que tome la representación de los afectados.

Esta entidad ya había asumido las acciones judiciales en la situación que vivieron en la cárcel Antofagasta.

"Recibimos una rápida respuesta del señor Marelic, quien al instante designó a la abogada de la Unidad Jurídica Nacional, para hacerse cargo de la denuncia y dar respuestas a las víctimas", informaron desde el Movilh.