Cifras 2017 ratifican interés en educación técnico profesional
Uno de los énfasis de las políticas de educación en el último tiempo ha sido la formación técnico profesional. Y, después de conocerse las cifras del sistema de educación superior, publicadas por el Consejo Nacional de Educación, la idea se refuerza.
Los números dan cuenta que este 2017 se matricularon, en primer año, 43 mil 210 estudiantes en los planteles de educación superior que tienen presencia en el Biobío. La mitad de ellos lo hizo en un centro de formación técnica (CFT) o instituto profesional (IP).
En total, este año hay 1.162.306 personas cursando carrera en alguna de las 38 instituciones de educación superior que tienen sede en la zona.
Sergio Camus, seremi de Educación, planteó que hace unos años el gobierno está impulsando medidas para potenciar la educación técnico profesional. Como ejemplos citó la actualización curricular de los profesores de enseñanza media para este segmento y la articulación de los centros educativos que imparten programas de este tipo y las empresas.
Dentro de las más recientes, explicó, está el consejo regional de educación técnico profesional, instancia que se constituirá el próximo viernes 30 de junio.
"Estará integrado por un sinnúmero de instituciones y el objetivo será determinar los requerimientos locales, ver qué tipo de técnicos se requieren en la región para asegurar su desarrollo en los próximos años", detalló.
Cruce con beneficios
Si bien la gratuidad se implementó el año pasado, fue recién este 2017 que el beneficio se extendió a la educación técnico profesional.
El impacto que generó se vio en el incremento de matrícula en aquellos planteles que cumplieron con los requisitos, que registran, en contraposición de aquellos que no cuentan con gratuidad, que exhiben una sostenida caída en el ingreso de estudiantes (ver gráficos).
Hay otros beneficios que también han influido en el comportamiento de la matrícula en educación técnica. Después de un peak de 16.998 matriculados en 2013, los institutos profesionales han registrado una baja en el ingreso de alumnos. Este año recibieron 13.971 estudiantes.
Para el seremi de Educación, una posible explicación a esto está relacionada a la acreditación. Aquellos planteles que no están certificados no pueden recibir fondos del estado y por ende, sus alumnos quedan fuera de los beneficios. Con la incorporación de nuevas becas Milenio, los alumnos optaron por los planteles de mejor calidad, proyectó Camus.
Leve estancamiento
Al mirar las cifras globales de matrículas se observa que si en 2013 unas 43.536 personas entraron a un plantel de educación superior, este año el total fue de 43.210. El año pasado fueron 43.028.
Para Raúl Figueroa, director ejecutivo de Acción Educar, esto se explica por el alto nivel de cobertura. "Por eso no es raro ver que las cifras de alumnos matriculados tiendan a mantenerse. Hemos alcanzado niveles de cobertura muy elevados y por eso a veces pueden bajar", mencionó.
Añadió que esto, además, demuestra que el impacto de la gratuidad es marginal, en cuanto a mejorar el acceso a la educación.