Cuidar la postura corporal para tener una vida más saludable y plena
Uno de los valores intrínsecos de nuestra corporeidad e identidad personal es la postura corporal. Gran parte de lo que somos y hacemos queda reflejado en esta condición humana que cruza los ámbitos de la imagen personal, la salud y la funcionalidad corporal.
Más allá de un simple equilibrio de fuerzas o la anulación de una resultante de ellas, como la definen las ciencias físicas, la postura es un proceso estático y dinámico que incorpora los conceptos fundamentales de economía y funcionalidad.
Existen tantas posturas como actividades o actitudes posturales se puedan imaginar. Éstas deben dar cuenta del menor gasto energético posible y facilitar la funcionalidad, manteniendo un sano y adecuado equilibrio entre las estructuras corporales del sistema musculo esquelético. La distribución del peso, el balance de las fuerzas musculares y la distribución de los movimientos dentro de rangos articulares adecuados, son cuestiones que se deben considerar.
Las características de los componentes de los tejidos del sistema músculo-esquelético, alteraciones congénitas, malos hábitos o vicios posturales y las condiciones que imponen las actividades laborales y de la vida diaria, como interacción con interfaces de pantalla de televisión, computadores, manipulación de herramientas, manejo de cargas o largas jornadas en estaciones de trabajo mal diseñadas que impiden una adecuada higiene postural, conspiran y son causa de esta condición.
Un grupo de especial preocupación son nuestros niños que, siendo portadores de alguna alteración postural, cursarán con un incremento de éstas y de sus complicaciones, al aumentar, junto con las dimensiones corporales, las alteraciones ortopédicas y funcionales.
Los profesores tienen un lugar de privilegio para detectar de forma temprana estas alteraciones, en especial aquellos de Educación Física que se relacionan directamente con la corporeidad y el movimiento. Estos se encuentran en inmejorable situación para realizar un trabajo preventivo en salud escolar.
Una buena postura propone mejores condiciones de salud física y mental, con una mejor percepción de la imagen personal, mejor desempeño en las actividades de la vida diaria, laboral y mejores ejecuciones técnicas en el trabajo el ejercicio y el deporte.
Cuidar nuestra postura es cuidar nuestro cuerpo, nuestra salud y una nuestra vida.