Con una emotiva ceremonia y junto a 300 de sus miembros, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días dio ayer la palada oficial para la construcción de su nuevo templo, y que se transformará en el recinto más grande de los mormones en Chile.
El edificio estará emplazado en la conocida como Quinta Junge y se estima que los trabajos se extiendan por tres años en una obra que no será menor: el terreno cuenta con 1,5 hectáreas de extensión, mientras que el inmueble será de 2 mil 500 metros cuadrados y de dos pisos. Incluso, algunos detalles serán realizados a mano.
La ceremonia, que fue transmitida en vivo a todas las iglesias mormonas del país, fue dirigida por el presidente del Área Sudamérica Sur, Walter F. González, quien entregó un mensaje de apoyo a los presentes y, especialmente a quienes se van a ver beneficiados con la construcción de este nuevo templo, que son cerca de 2 mil personas.
BENEFICIOS
El elder González comentó que "nosotros creemos que va a impactar mucho más allá de lo que podemos imaginarnos hoy día. Para los miembros es central, porque todo lo que hacemos en la iglesia nos lleva a lo que hacemos en los templos para mejorar nuestras vidas, para fortalecer nuestras familias y fortalecernos como individuos, por ende, eso es una influencia en la sociedad, es una contribución".
Además, destacó el diseño del templo, el que espera "esté en una perfecta simbiosis con el lugar, con el entorno, con la naturaleza, eso lo va a hacer muy bonito para toda la ciudad, será un punto de referencia en algún momento. Pero, la influencia más importante será el que sea un lugar de invitación a las personas de llevar vidas mejores, ellos y sus familias".
El segundo consejero y miembro del Área Sudamericana, José A. Teixeira, agregó que "en todas las partes del mundo que tenemos templos, se han trasformado en un lugar icónico para los no miembros de la iglesia, porque es abierto al público, las personas pueden utilizar los jardines y disfrutar de un lugar hermoso".
Es por esto que ellos creen que la edificación puede ser un punto a favor para el turismo de Concepción, especialmente porque personas del sur del país y parte de Argentina son los beneficiados directos con esta obra, quienes ya no tendrán que viajar hasta Santiago para casarse, por ejemplo, lugar donde está ubicado el único edificio de este tipo de la religión.
MIEMBROS
El presidente del Área Sudamérica Sur aclaró que una vez que la construcción del templo esté terminada, habrá un plazo de un mes para que los no miembros puedan visitar el recinto y luego, una vez consagrado, el ingreso se limitará sólo a quienes tengan una recomendación para entrar, es decir, que cumplan con los lineamientos de vida que tiene la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
De todas formas, los jardines -que mantendrán los árboles nativos de la Quinta Junge, como las palmeras y las araucarias que allí se encuentran- se mantendrán siempre abiertos a la comunidad.
Teixeira agregó que "el templo es un lugar de paz, imagino que el impacto con los vecinos será muy evidente cuando esté listo, porque es un lugar tranquilo, un lugar muy hermoso, que se sentirá esa paz, imagino que los vecinos aquí en la comunidad y alrededor del templo irán a sentir esto inmediatamente".
La construcción de este templo fue anunciado por el presidente de los mormones, Thomas S. Monson, durante una conferencia general que se realizó en octubre de 2009.
El elder González, puntualizó que "estamos seguros que les va a gustar el edificio, va a ser uno de los más lindos que vamos a tener en todo Chile. Les invitamos a que vayan viendo cómo va creciendo el templo e incluso van a poder sentir algunas cosas especiales, porque en lo que creemos es genuino, con toda el alma".