En las regiones de Antofagasta, Valparaíso, Metropolitana y Biobío, la empresa Daily Foods, a través de E-press Research, realizó la investigación "Dulce Chile", que buscaba indagar en los hábitos alimentos, el consumo de azúcar y endulzantes de los chilenos. Y, al mismo tiempo, educar respecto a estos productos.

Y es que, luego de que cifras entregadas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) dejaran a Chile como el quinto país con más obesidad en el mundo, era importante adentrarse en la realidad. Por eso, fueron 780 las personas mayores de 18 años las que participaron en esta investigación que arrojó importantes hallazgos.

DESINFORMACIÓN E INTERÉS

Del total de encuestados, un 63% dijo que no se encuentra conforme con su físico y el 80,6% reconoció el exceso como un factor que le incomoda. Es así como el 69% de los encuestados dijo consumir algún tipo de endulzante, el 46,7% lo hace para mantenerse en forma, el 20,7% como parte de una dieta y rutina de ejercicios para bajar de peso, y el 20% sólo por costumbre.

Lo anterior demostraría cierto interés por mejorar los cuadros de sobrepeso y la salud en varios segmentos, pero uno de los hallazgos clave del estudio se relaciona con la desinformación respecto a estos productos, en cuanto a sus orígenes, posibilidades de uso e índices de ingesta diaria permitida tanto en endulzantes naturales o azúcar. De hecho el 53% dijo no leer el rotulado a la hora de comprar productos que contengan el último elemento.

A nivel local, un 69,5% de los penquistas afirmó consumir productos elaborados con endulzantes.

SIGUE EL AZÚCAR

La tendencia por seguir la vida saludable va de la mano con que el consumo de azúcar vaya descendiendo al tiempo que el uso de endulzantes se incrementa. De hecho, siete de cada diez hogares en Chile consume algún tipo de estos productos, y los favoritos son la stevia (59,7%) y la sucralosa (31,6%).

Pero, a pesar de lo que se traduce en la baja de 3,5% en el consumo de azúcar, hay un 37% de la población que todavía la consume. Esa cifra se dispara a un 88,2% en los estratos socioeconómicos de menos ingresos. De hecho, al hablar sólo de bebidas calientes, un 59% dijo agregarle azúcar, y un 25% de este porcentaje lo hace en una dosis que va de 4 a 8 cucharaditas diarias.

Desde allí, la nutricionista Gabriela Aguilera afirma que la tasa de consumo de azúcar en Chile, tanto en alimentos procesados y bebidas, como agregada, sigue siendo muy alta. "Las personas en general ven la medida de manera separada, ya que se les olvida que la azúcar que agregan a sus alimentos y bebidas, se suma también la que proviene de otros que ya la incluyen en su preparación, lo que en suma genera un aporte calórico que muchas veces es superior al necesario", finaliza.